En la colina el joven centurión engalanado y orgullo observa su centuria: Jóvenes jocosos, entrenan con espadas de palo las tácticas de combate,...
El domingo fui de pesca con mi padre, era temprano el sol aún se estaba desperezando, las hierbas y flores llorosas, la niebla al compás del...
Lagrimas lacustres: de tus luceros suspendidas,calcinan el alma, revientan el dolor. Volcanes de dolor: ardientes sollozos embrazados. Lamentos...
Me pides que escriba, no sé escribir, poeta de taberna, de trazos sin pulir. Sólo cuando todo se agita, se convulsiona, estalla y se rompe, la...
Las calles de luces adornadas, los árboles de colores ataviados, las tiendas de regalos atestadas, de olor a castañas los fríos impregnados....
Sobre arenas ardientes y yertas.... Arenas sin vida, rebosante de deseos contenidos... Madre estéril sin amante ni sueños... Reina y señora de...
En la españa quijotesca, la misma condena, por matar uno o una docena. Si en veinte años no te ven, crimen perdonado es, pero si debes a la...
Suena la trompeta y el silencio se derrama, cristaliza el horror, se oye el tropel, incontenible e imparable. Aparece el toro, magnifica, bella...
Rico muchos amigos tenía, hoy pobre rezo solo la letanía. Me envenenaron sus alabanzas, y me exprimieron entre sus tenazas. Muchos presentes sin...
Desplomándose sin mesura el agua caía, caía el agua a plomo sin compasión, compasión extinguida y sin razón, razón esquilmada a la luz del día....
Todas las noches miro por la ventana, me han dicho que si miras bien, ves un camino de plata, y que por ese camino vienen. En camellos con...
Mis viandas son corrientes, pero aliñadas con hambre son imponentes, y sazonada con la gula incontinentes. Heladera desértica, fiambrera...
Cerca de ti..., sintiendo tu calor.. duermes plácidamente, y me extasio mirándote con ansias incontenibles e incombustibles... Que sueños,...
Hoy es día de: oír a las alegres y juguetonas gaviotas, de escuchar las cadenciosas y perezosas olas, de dejarse seducir por el mar... de...
Vacío y desolado... Yaciendo sobre lo ordinario, apagado, ciego y sordo. Apareciste tu...... Y el vacío se llenó de vida. La desolación se torno...
Muerte, destrucción, odio, dolor, dolor intransigente y cruel, impúdico e impiadoso; todo acabó la bella señora viene por mí, llegó mi hora.... El...
El mar perezoso y soñoliento abraza la órea arena, meciéndola, acurrucándola, besándola, amándola, lánguidamente y sin premura, acunándola sin...
Hace mucho me concibieron, nací para ayudar, sin mí poco se puede yantar, pero con el tiempo me pervirtieron. Ahora soy señor del hambre, verdugo...
Parida de mi señor fui, nacida libre e impúdica, Mis primeros balbuceos, sonrisas y lisonjas me trajeron. Mis primeros tropiezos, alabanzas y...
Odiosa, cruel y despiadada, mortal, torturadora y desgarrada, malévola, leprosa y descarnada, asesina, melindrosa y despatarrada. Mutilas a quién...
Todo se derrumbó y tú te erguiste, todo cayó y tú permaneciste, todo voló y tú te aferraste, todo se inundó y tú navegaste. Has perdonado: cada...
Desolación incontenible, amargura desdentada, aya descastada, dolor insufrible. En lo mas profundos abismos, en los mas oscuros rincones, en los...
Vuela conmigo, junto a mí; Deslizate por la fantasía. Vive la irrealidad, despierta los sueños, Abrete a la ardiente y penetrante pasión,...
Que el oro refulgiente y traicionero, no entre en este oasis de sosiego. Bebe y aplaca tu sed, come y sacia tu hambre, El oasis no sé si es de...
La tristeza rezuma y chorrea, La amargura se hincha y revienta, La acongoja se abochorna y sonroja, El dolor se contorsiona y aprieta....
La diosa fortuna hizo girar su mágico timón...., y en tu nacimiento arrojó sin miramientos, con desenfreno despilfarrador y tesón, semillas de...
Los cimientos se cimbrean y tiemblan, los muros se agitan aterrados y miedosos, las torres orgullosas, desafiantes y pétreas son sacudidas, se...
Persecución fratricida y locuaz, Locura avara y calenturienta, Asesina de felicidad y contento. Buscas y persigues la nada Acosas y derribas el...
El campo vestido de oro viejo, sediento, hambriento y harapiento; otea desesperado el horizonte: Espera premónicas nubes preñadas de azules...
Lloraba la niña hambrienta, envidiosa de la niña rica estaba. Lloraba la niña rica por callejear a sus anchas, envidiaba a la niña pobre con...
Antonio: ¿Dónde estás? ¿Dónde has ido? Qué amistad tan púra y excelsa me regalaste. Inamovible e inquebrantable: Nada ni nadie pudo nunca...
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