Voces Desde El Destierro

Otra vez el mismo destierro,
la misma excusa,
el mismo destino.

Un cielo cruza fugaz dentro de una mirada,
un destello perdura en el dolor.
¿Quién fuera silencio para gritar esta agonía?
¿Quién fuera tiempo para aferrarse a tu piel?

Ayer tu canto endulzaba mi delirio,
ahora tu olvido, tu miedo, tu desprecio. . .

- ¿Por qué te detienes ahora?-
Un puño apretado golpea sobre la mesa,
un sueño galopa sobre la arena de tu desierto
en esta playa sin confines,
en donde pululan las penas, el desasosiego y el amor.

¿Amor?
talvez,
¿Acaso no puedo contagiarme de soledad?
Ayer distorsioné tu recuerdo en mis impotentes brazos
y tu sexo
(arrollo cristalino de providenciales aguas)
y tu sexo fue mi sexo, y tu vientre. . .

Otra vez caí en el delirio.

Un jazmín,
un cielo, un beso, un verso,
un sendero solo
-individualismo tirano del exilio-
Un día éramos tú y yo,
este día sólo quedas tú.
Y yo en medio del abandono
me cobijo con el manto del vicio
escrutando vírgenes prostituidas
en eterno celo,
y tú. . .
-la mente se queda en blanco-
quimera inútil en la luna de mis noches de insomnio,
como callando la mentira,
como ocultando tu rostro entre luciérnagas
(eternos destellos de la nada).

La rosa ya no sonríe,
Eolo olvidó sus juegos nocturnos,
trasnochada y mustia
el alma
envejeciendo en su tallo,
cual saeta clavada al vergel de la memoria
en donde un suspiro, suspiro es
y un amor,
¿un amor? Espejismo es. . .

La noche cede un segundo a cada enamorado,
la noche regala una estrella al enamorado,
la luna consuela un segundo al enamorado
y la amada se lleva, cual estrella fugaz,
en un segundo la vida del enamorado.


No quisiste soportar tanto amor,
fue tu alma tan pequeña,
fue tu vacío tan grande

Mi cruz será volver a mí,
regresar a mi origen
con las manos llenas de tanta soledad y el alma seca,
como el lunar en mi oreja izquierda,
solo
bajo la sombra de un verso moribundo
en el instante último
de ésta masturbada vida. . .

 

Mucha melancolia y muchas voces que se escuchan desde lejos hermosas imagenes las que muestras ha sido un placer leerte de verdad hermoso poema saludos y Feliz Navidad.

 

Mas que destierro ha sido un largo exilio, he sido un extranjero de mi propia vida, de mi propio destino, me he ausentado de mi ilusión y he dejado mi esperanza colgada en el perchero donde aún permanece el traje de bodas que compré para un día cualquiera.