Soneto con ojos y astros

Como asoma, luego de la tormenta,
con la tranquilidad de lo seguro
el sol, así asoma nuestro futuro,
tras cada lluvia que mi alma inventa.

Mirar tuyo de amanecer, ahuyenta
a mis pensamientos de cielo oscuro,
mirada de sol que al verla murmuro
dos coplas que besen sus ojos de menta.

Detras de las nubes, siempre el sol arde,
o en la noche cicatriza la luna,
si lluevo por celos o por cobarde...

Que brille en tus ojos, que son mi cuna,
sea el día, la noche o la tarde,
el astro tenaz de nuestra fortuna.