Sentado en el trono

Todo era silencio,
la paz inundaba
caudal de recuerdos
tu cuerpo evocaban.

Sentado en el trono
los sueños fluían,
de mi alrededor
los siervos huían.

Casi todo silencio
hasta que resonaba
del tambor el redoble
en la sala cerrada.

El fino blanco lienzo
ante el trueno temblaba
y aquel estallido
tu recuerdo borraba.
​

 

Un placer leer tus buenas letras.
Un saludo

 

Pero no podrán borrar tus estallidos de genialidad e inspiración, querido poeta. Buen trabajo, bien logrado. Te mando un gran abrazo.

 

Javier, Newton, gracias por vuestros comentarios.

 

Es innegable que la inspiración llega en cualquier moment y lugar. Un placer pasar por tus genialidades. Mis estrellas y felicitaciones. Un gran abrazo y miles de besos.

 

Gracias por pasar y comentar poetisa chilena.

 

Parece que fuera el mismo Minotauro desde su laberinto. Preciosos versos de arte menor, arromanzados. Luis

 

Gracias Luis. Es una mezcla de dos o tres intentos de hacer algo. Me fui por los cerros de Úbeda.