Razones

Porque un día llegaste

Porque viniste a sacudirme las vísceras

Porque abriste en canal mi pensamiento para indagar en la médula espinal

de la nostalgia

Porque cada una de mis heridas sangró luz

y se cerró a tientas sólo para abrirse de nuevo al tacto

de tu lengua

Porque las mariposas aún tienen el color de tu mirada

Porque tu mirada enciende todavía una pira de estrellas

sobre el invierno de mis desencantos

Y, sobre todo, porque siempre Estás y porque Eres,

aunque sólo puedas comprender el lenguaje

de un veinte por ciento de mi sangre

y tus pulmones no toleren el humo

que exhalan estos dedos volátiles

Aunque te asusten los delirios de esta loca

que va cosiendo tarde a tarde cada latido de su corazón

a la palabra.

 

Querida amiga, es inmenso el poema. Tu voz recupera de los instantes perdidos la razón de seguir amando. El tacto que sugieren los versos, y es debido al arte que desbordan, hace posible reunir todas las aromas de un tiempo evaporado. Muchos abrazos, Rosa y felicitaciones sinceras.

 

Es tu mirada más que sensible y la belleza de tu comentario, lo que engrandece estos versos sinceros y sin pretensiones. Muchas gracias por detenerte en ellos, querido amigo. Un abrazo.

 

Sin duda, unos delirios inmensamente sensibles y hermosos. Una verdadera preciosidad de poema, Rosa.
Mis aplausos y un abrazo grande, querida amiga.

 

Cierto querida MARLA,
los poetas cosemos y bordamos palabra a palabra
un río de vida para intentar alcanzar
la felicidad que tanto anhelamos.
Eres grande querida amiga, un beso.

 

Razones para esclarecer el pensamiento en voz baja...
Precioso poema, felicidades.

Palmira