Perdidos en el tiempo.

PERDIDOS EN EL TIEMPO.

La verdad es que nos perdimos desde hace mucho tiempo, no puedo recordar en qué punto nuestros caminos se separaron, y tampoco viene a mi memoria el día que todo termino.

La verdad es que por intervalos dejábamos de pertenecer nos, a veces en periodos más largos que otros, en algún punto nuestra mirada perdió intención y nuestros ojos se oscurecieron.

La verdad es que como tú, como tu nadie igual, no sé cuándo comencé amarte y tampoco cuando dejamos de sentirnos, no sé en qué punto nuestra respiración se independizó, tampoco que, en el paso de los días, la memoria borró nuestras huellas, no sé bien cuando dejamos de leernos el pensamiento o cuando nuestra canción de amor perdió sentido.

La verdad, en el camino dejamos nuestros besos, pude llevarme unas palabras de amor, pero elegí dejar nuestros abrazos, eran demasiado pesados para llevarlos, en algún punto del camino aún pueden encontrarse, algunos momentos, otros se marchitaron.

No sé qué tan lejano fue nuestro inicio y tampoco sé cómo acaba el camino, sigo con paso firme, aunque la verdad mi interior está fragmentado, nos quebramos con el paso de los días, nos amamos tanto que nos consumimos.

La verdad es que nadie sonríe como tú, que no hay persona alguna con el poder de detener el tiempo como tú, que nadie me saco una lagrima de amor y mucho menos me hizo llorar de felicidad.

La verdad es que en lo profundo de tu mirada me perdí, como en un abismo, lo curioso de nuestra historia es que cuatro segundos bastaron para que nuestras almas se conocieran, nuestros ojos crearon esa conexión y hoy, al mirarte, me doy cuenta que esa magia nos abandonó, que el amor se nos escurrió como agua de entre los dedos, no sé en qué punto el amor se escapó por la puerta.

Ha sido un viaje cansado y ahora solo queda nuestra experiencia, la verdad es que algunas noches te extraño, a esa increíble persona que poseía la capacidad de protegerme en sus brazos, que me hizo sentir el ser humano más vivo del mundo, aquella que me hizo inmortal en una parte de su memoria.

Aún sigo buscando mis sueños, la esperanza no desapareció, te dejo mis deseos, no los necesitare, la verdad es que te amé como a ninguno, y como todo, nos volvimos nada.

Te escribo una carta que tal vez nunca leas, te dedico mis sueños, hasta que la memoria ceda, te deseo una felicidad placentera, que la chispa en tus ojos ya no muera, ay, mi cielo, ¿Cuantas cosas no pasamos en el camino? la verdad es que a veces te necesito, a veces compartimos sueños, dejaste tus más grandes miedos y las pesadillas de vez en cuando regresan a buscarte.

La verdad es que mi corazón se acostumbró a estar lejos de ti, la verdad es que en mis días tristes veo tu fantasma, después de tanto tiempo decidí colocar los restos de nuestra historia en una caja, y la coloque arriba de mi ropero, donde nadie pudiera tomarlo, donde los niños no lo alcanzaran, la verdad es que nos volvimos desconocidos el uno del otro, solo quedan los tatuajes en mi piel.

La verdad es que dejamos de existir, yo en tu memoria y tú en mi corazón, nos fuimos olvidando, no ahora, si no desde el comienzo, nos acabamos con tantos besos, volamos tan alto en aquel sueño, que nos atravesamos como el rayo en el cielo, volamos como aquella ave libre y nos dejamos como el árbol que pierde sus hojas.

Te escribo esta carta como recordatorio de lo que un día fuimos, como recordatorio que un día nuestras almas fueron una sola, ¿Recuerdas nuestro primer encuentro? ¿Nuestra primera sonrisa? ¿Recuerdas nuestros días dorados? ¿Nuestro viaje ? ¿Recuerdas cuando nos dijimos te amo? o ¿Nuestro primer baile y nuestra primera canción?

Ay, como sufrí contigo, como sufrí amándote, ¿En qué punto nos perdimos?, ¿Cuándo, el amor se rindió con nosotros?, no sé qué hubiera pasado si hubiéramos seguido en el mismo camino, no sé si aún sigo viviendo, que estés vivo no significa que realmente estés viviendo, te amo, te amé, te quise, ¿Dónde quedamos? ¿En qué punto nos desconectamos?

Alguien me pregunto si creo en el amor, sin pensarlo respondí que sí, la verdad no estaba seguro. El amor es como una sombra, siempre está presente, a veces visible, otras no, a veces más grande que uno mismo, el amor es una versión de nosotros en dosis exactas, no más, pero tampoco menos.

En una dimensión paralela, la verdad es que somos felices estando lejos, la verdad es que fui tan importante para ti, que nunca te imaginé tan lejos.



Con todo el amor que un día sentí , te dedico mi ultima carta primer amor, aquel que me cautivo, a ti, querido primer amor.