No fuera tal vez feliz (ovillejo)

Lo que anduvo en larga espera​

no fuera

de gozosa madurez

tal vez

y por presta directriz

feliz.


Lleve el amor cicatriz

mas no feral amargura,

aunque abierto sin ternura

no fuera tal vez feliz.

eduardocarpio
14 de febrero de 2016​

 

Un elegante y romántico ovillejo, estimado Eduardo, con giros gramaticales encantadores y dos pies oxítonos que, engranados en el verso final, cierran el poema en gran forma. Extraño tus comentarios a mis poemas, pero asimismo me siento contento de poder leer los tuyos y contarte entre los poetas que admiro.
Un abrazo infinito y gracias por el instante de verdadera poesía.

 

Admirado maestro Eduardo Carpio.
Ha descrito, con gran "maestrìa y acendrado realismo" la manera tal vez "absurda, incoherente e irracional"... de mi forma como aprecio y siento la palabra "amar"; gracias por haberme sacudido en los simientes de mi "terquedad" que posiblemente exista el "amor"; aunque sea en una forma "equivocada", bellìsimo y penetrante Ovillejo... lo saludo Afro d'Olivan.

 

Hermoso ovillejo, Eduardo, que en esta ocasión se refiere a las heridas y huellas que deja el amor que, por desgracia y en muchas ocasiones no es causa de felicidad sino más bien lo contrario.
Por cierto, gracias por descubrirme el vocablo feral que desconocía.

Un saludo con mi felicitación.

 

Excelente ovillejo, estimado Tocayo,
como no podía esperar otra cosa,
gran calidad en este reflexivo ovillejo
que encierra en sí, una reprimenda al uso de la violencia,
de cualquier clase que sea, en este caso en el amor.
un saludo cordial,
Eduardo

 

Estimados Elhi, Bolívar, Juan, Eduardo
Al no disponer de tiempo, apenas ojeo el portal y en consecuencia casi no me detengo en alguna letra ajena, incluso en aquellas que me dejáis a modo de comentario atento, perspicaz y considerado. Y, claro, parece que soy desagradecido, limitándome al mínimo acuse de recibo y saliendo raudo a otros menesteres. Por repetida tal conducta, además, pareciera que solo fuese de mi interés alguna que otra reseña, incluso que se tomara por desapego, falta de estima o menosprecio. Ni de lejos.
Y pocas alternativas caben. Dedicar un tiempo razonable, es decir, con mayor participación, tiene poco de plausible en estos momentos, aunque sí de deseable. ¿Seguir como hasta ahora¿, ¿apagar las luces definitivamente?, ... No lo sé. Desde hace tiempo siento como ingrata esta escasa dedicación. A todos les agradezco sus escrituras y sus conocimientos compartidos, pues poco o nada espigaría, al menos por mi parte, si así no fuere. Mañana, indudablemente emborronaré algún papel...

Ese silencio largo, plenitud
de la elipsis, palabra que se alienta
en soledad, calladamente dulce
por madrugada luz que se desata
y no se tinta letra de escritura...
Un abrazo
eduardocarpio

 

Eduardo, un buen ovillejo nos comparte. Un gusto haberme detenido a disfrutarlo. Saludos cordiales.

 

Eduardo, es usted un excelente poeta y su trabajo denota calidad y calidez, a mi manera de ver, dos factores esenciales en la buena poesía.
Reciba mi admiración
Saludos
MANUEL

 

Excelentes ovillejos, amigo. Ha sido un placer la lectura. Un abrazo

 

Geralda, Manuel, libelula, Marah
Ante todo complacido por vuestros comentarios, tan elogiosos, sobre el ovillejo. Requirió esfuerzo darle la forma final, pero lo dais por bueno y yo por gratificado. Un abrazo. eduardocarpio
PS Quienes aquí tienen maestría y la comparten, me proporcionan los rudimentos -y ahí sigo y estoy- para poder expresarme sin ofender en demasía, digámoslo en general, a la lingüística y sus contornos. Luego la práctica va dejando el poso. Y, por supuesto, repito, el comentario del lector y el fundamento, irremplazable, que siempre se sustentará en quien leyó, lee y leerá, ambos indispensables para que alguien lo pueda hacer un poquito mejor cada día.