Mi aMaNTe GRiS

Callas
cuando lo quieres decir,
y a pesar del silencio,
te escucho claramente.
Tu voz muda
llega a mi oído,
gritando.
Te sientas en las rocas,
escuchas la brisa del mar
en cada ola que llega
para acariciarte.
Acostada en las nubes nocturnas,
esperas paciente
a que la sombra cubra
tu desnudez.
Llegará una noche
en la que desearás ser real,
pero ese sueño se verá frustrado
gracias a mi escasa imaginación.
Llegará el momento
en el que te pararás en la orilla de un abismo
y desearás poder
caer al fondo.
Y no lo permitiré.
No dejaré que seas real.
Nunca lo permitiré,
pues si así fuese,
podría perderte.​