La princesa y el bufón (serie erótica del Tamboura)

LA PRINCESA Y EL BUFÓN

(Una Historia Del Tamboura)

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-Es día grande, señores.
Enriqueta, sirve vino
y buen jamón con tocino
(ya que niegas tus favores.)
-¿Por qué tantos estertores
acompañan tu presencia?
-Fue la pura coincidencia
quien me llevó hasta la Cava
y en vez de Ron encontraba
este escrito de excelencia.

-Pues vamos con la lectura
de ese papel singular
que, producto del azar,
felices vientos augura.
-Procedamos, por ventura,
que nos tienes impacientes.
-Os advierto, mis valientes,
del explícito erotismo
carente de simbolismo
en sus versos sugerentes.

(Llega Enriqueta con vino,
con tocino y con jamón.
Bajo su blusa un pezón
apunta sabor divino)

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(Serie de Alto Contenido Erótico: LA PRINCESA Y EL BUFÓN... Continuará -Si no lo censuran-)

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Chu

 

El Manuscrito (Primera Parte)

"... desnuda ya la princesa,
entre pétalos de rosa,
me ofrecía lujuriosa
sus labios de miel y fresa.
Y sus ojos de tigresa
en el agua reflejaban
fulgores que reclamaban
alivios de caballero.
Tocábase con esmero
sabiendo que la observaban.

Salió de baño radiante
implorando mi atención,
y yo -sirviente y bufón-
volví mi rostro al instante.
-¿Qué tienes en el semblante?
-No tengo nada- mentí.
-Pues no me mires así
y acerca tu cuerpo al mío,
y esas gotas de rocío
que me recorren la espalda
serán para ti guirnalda
cuyas flores te confío.

Recorrí con precisión
todo su cuerpo desnudo
y como soy concienzudo
desperté su admiración.
No rechazó mi pasión
cuando besaba su cuello
tan delicioso y tan bello
como la lluvia de abril,
y sus pupilas añil
eclipsaban su cabello.

Me detuve en sus pezones
que contemplaron al cielo
sin mesura ni desvelo,
rebosando sensaciones
Animó mis intenciones
y acompañó con gemidos
los placeres reprimidos
que mi lengua le ofrecía.
¡Qué tremeda mi osadía
en esos senos erguidos!

Mis manos, con suavidad,
rodearon su cintura
y en su pubis la dulzura
se transformó en humedad.
Logré su felicidad
sobre el clítoris rendido,
excitado, ya vencido,
que encontraba en su entrepierna.
¿Habrá manera más tierna
de lograr mi cometido?

Y sus muslos tremorosos
se convertían en fuego
apaciguandose luego,
vacilantes, sudorosos.
Placeres indecorosos
le devolvieron la vida:
la caricia recibida
iluminó su pasión.
Pasó entonces a la acción,
por su calor encendida..."

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Chu (continuará)

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Acá el erotismo fue tocado con cierta incertidumbre, casi pasa desapercibido, pero al parecer viene con capítulos posteriores que permitirán próximas sugerencias al tema. Ese breve pezón promociona lo que será una excelente historia de erotismo.

 

EL MANUSCRITO (Segunda Parte)

"... Condújome hasta un salón
y allí mismo, de rodillas,
me mostró sus maravillas
y me hizo una felación.
¡Que grandiosa sensación
sentir mi sexo explorado
con un ritmo sosegado.
Sin olvidar un resquicio
me concedió el beneficio
de un placer insospechado.

Con infinito saber
su lengua me enloquecía
mas ella se resistía
a dejarme sin placer.
Tenía que obedecer
y permitir sus manejos,
tan sutiles, tan complejos.
Y su lengua se entregaba
con ardor que delataba
previos y sabios consejos.

Y su boca se aferraba
al placer que yo sentía
mientras su mano movía
el miembro con que jugaba.
Cuando mejor ella estaba
con mi señuelo en su boca,
rígido como una roca,
no pude más y estallé
y de pronto liberé
mi semilla, que no es poca.

Pareció que le gustaba
sentir mi miembro viril
tan generoso y gentil
que todo se lo entregaba.
La Dama se masturbaba
mientras mi glande lamía
lo que mucho complacía
a mi querida princesa.
Y de su lengua traviesa
ya nunca me olvidaría..."

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Chu

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(Continuará)

 

Gracias, Juan. Te informo de que la serie se publica como adherido en este mismo post. Un abrazo. Chu.

 

Sigue así y nos vamos a calentar de lo lindo.

Si la princesa gemía
y al bufón le contentaba
la lujuria que mostraba
su placer no contenía.
Brutalmente me corría
con abundancia en su boca
mas ella no se sofoca
y hasta me lame los huevos
provocando los renuevos
de fuerza en mi polla loca.

 

Gracias Luis Adolfo. Un abrazo. Chu.

 

Jajaja... Gracias Maramín. Tiene que ser la primavera. Un abrazo fuerte. Chu.

 

Gracias, amigo Epimeteo. Un abrazo. Chu.

 

EL BUFON Y LA PRINCESA (3)

"... Y la tomé por detrás
con ademán consentido,
más diría, requerido
porque demandaba más.
Yo nunca digo jamás
a los placeres mundanos
y como buenos hermanos
comenzamos el vaivén
sin braguitas ni sostén
se enlazaron nuestras manos.

Era tal el frenesí
que tres veces nos corrimos
entre gritos y agarimos:
Nunca viose cosa así.
Otra vez más repetí
mientras ella enloquecía.
En su orgasmo producía
sudorosas convulsiones,
magníficas sensaciones
que su sexo agradecía.

Puse mi miembro en su boca
mientras ella masturbaba,
con lo que mucho gozaba,
su clítoris como loca.
Y es que nunca se equivoca
quien otorga bienestar
en las artes del amar
a la mujer que disfruta
de la pasión disoluta
que supone fornicar."

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Chu

(Continuará)

 

EL BUFÓN Y LA PRINCESA (IV)

"...Su sexo humedecido recibía
del mío la abundancia de un torrente
que pugna por abrirse vehemente
camino entre la dama que gemía.

La dama entusiasmada enloquecía
y el fruto de un orgasmo reluciente
ponía en su semblante el estridente
rubor por el placer que conseguía.

Sus manos a la sábana aferradas,
mordiendo de sus labios el carmín,
sus muslos como yeguas desbocadas.

¡Bufón: Te convertiste en Arlequín
amante de princesas enceladas
que buscan en tu miembro su rocín...!"

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Chu

(Continuará)