La noche se serena.

La noche se serena.

Experiencia única y personal
también colectiva y universal.
Somos la consciencia del Universo,
contemplarlo es puro embeleso.

Y algo más transcendente
que sentirse consciente,
es que el ser humano en su evolución
pueda influir en su programación.

A mi modesto entender
es más fácil comprender,
que el sentido de la vida pueda ser
lo que acabo de exponer.

Nos dicen que hay otra vida
y tal como la cuentan puede ser aburrida
al bueno, todo le será otorgado
al malo donde le duele, le será dado.

Prefiero la vida con tropezones
que marcan el camino de jalones;
sentirme del programador su opción,
ser colaborador en su creación.

Esta opción visto el resultado
parece un programa equivocado,
a estas alturas de la función
el camino andado no parece la solución.

La actual civilización he de reconocer
consigue logros en la ciencia y el saber,
pero algo "irracional" sigue habiendo
la diferencia social sigue creciendo.

Ese "algo" que a la evolución detiene
y pegada al reino animal mantiene,
es un lastre que si queremos soltar
con la solidaridad y la ciencia debemos contar.

Si observamos el reino animal
su manifestación instintiva, la vemos normal.
El comportamiento humano no es distinto
su inteligencia la pone al servicio del instinto.

El instinto es un arma de supervivencia
y a la humanidad le afecta en la convivencia.
Creo llegado el momento y con prudencia
diré, que superar instintos es cosa de la ciencia.

Avances científicos transcendentales
que permitan superar muros infranqueables
y que a ese "algo", que llamaré comportamiento
dependa de un "muro genético", que puede ser cierto.

Aquí la ética puede intervenir
a la naturaleza que es sabia debemos seguir.
La naturaleza lo hace todo a lo grande,
crea y destruye, ande o no ande.

Continuará... Amadeo.