Juliet y los unicornios

Pastad amigos...
pastad y sed libres en este vuestro campo,
aligerad el vuelo
y demorad la tristeza del duelo.

Dirigid vuestra mirada excelentísima y maravillosa
en dirección a la fantasía,
que el cuerno puesto en vuestra frente
sea señal de grandeza y respeto.

Pastad... reposad en medio de la hierba
y abrazad la algarabía,
vestid con las nieves del verano
y los soles del invierno.

Cuando os pregunten
el nombre de la pastora que derrumba muros
para que os tranquilicéis,
decid que es la noble Juliet,
hija de la fortuna y nieta de la vida.

Recordad que hubo tiempo
es que fuisteis adorados y místicos,
pero esos tiempos ...
unicornios míos han partido.

Yo crecí jugando con los ríos donde merodeabais
y humedecí mis cabellos
en los arroyos en que bebíais,
ahora cuido de vuestro reposo
y mi escudo es vuestra felicidad.

 

Compañero Uriel ha sido un placer pasar por tu poesía tienes en las palabras que escribes un halo mágico.

 

Muchas gracias Mary, se hace lo que se puede. Un placer recibirte.

 

Ayyy Robsalz qué magia y qué encanto destilan estos tiernos y delicados versos, con bellísimas imágenes sensoriales que nos llenan de ensoñación y recreo. Me ha encantado leerte. Besazos con cariño y con admiración.

 

El gusto es mío. Un placer recibirte.

 

Soberbia hermosura de letras preciosas.

 

Muchas gracias Jorge. Un placer recibirte.