Esa ventana

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Esa ventana,
de cuyo cuarto, siempre a solas,
vivía la trémula valía de la niñez;
entre abierta sus puertas,
seguía mirando a la calle,
hoy tan ajena a mis recuerdos.

Sus puertas adustas,
ese desteñido color que
sólo ponen los años;
abrió, chirriante, mi alma
a las nostálgicas horas de mi ayer.

Bellas rosas en sus manos,
confundían sus aromas con su fragancia.

Niña de grandes ojos,
tan brillosos, como inocentes,
mostraba su sonrisa, encandilando mi ser.

Hay lugares que entretejen sus espacios
con el anhelo y la dulzura que
siempre quedan a un lado al crecer.

Las eras pasan y… ...
Sus cabellos sueltos,
esa tierna mirada……

Esa ventana...