Epitafio Para Un Final Anunciado

EPITAFIO PARA UN FINAL ANUNCIADO (o “Epígrafe con relato”)

“Oh Virgen de la Riña!!, desenamorada hermana de la eterna ignominia!,
corazones peregrinos galopando al compás de la coca, monolitos gigantes de roca
del quimérico poder enfermizo, pon fin de una sola vez a tan sangriento hechizo!
sácame para siempre de la soledad de caer otra vez
bajo tu consuelo, gran bóveda nocturna!
alumbre para lucíferos, una nueva vida lejos de tu voz!

Oh Virgen del Desasosiego!!, amante de la necesidad!,
apetece con tiernos niños al vampiro moribundo de mi ansiedad,
ponte testa de verdugo y arremete sin consuelo la voluntad,
ponle alas doradas al tortuoso pesar
que con sagrada injusticia el pecado original nos impartirá.
--ponle alas doradas al tortuoso pesar!!

Oh tu, Esfinge del Diorama!,
tú, que del rico te ríes y al pobre complaces,
tu, salamandra candente en mundos tan decadentes,
tu, cisternas de una celeste fertilidad,
a ti te excomulgo del resto de mi finidad.
--tu, cisternas de una celeste fertilidad!!

A ti te extirpo cada letargo de una maravillosa piedad!!,
de tus látigos nublados ya me canse de estar enamorado
como vientos de tormentos que a un niño han endulzado.
--de tus látigos nublados ya me canse de estar enamorado!!
y tanto mas es que te huyo, cuanto que me duele mas,
y cuanto más es que me acerco, tanto que me pierdo más.”



en la soledad de mi cuarto oscuro
las vertientes de nuevos vientres
siguen trasparentes como siempre.

las sombras toman vida,
se tornan consumiéndome la vida,
cual sanguijuelas se mueven,
me gritan, me adormecen....

pero nunca aplacaran, necias musas!,
las aftas sonrientes, nidos de serpientes,
que en mi desconsuelo se hacen idolatrar.
como dioses, quebrantos del diluvio,
que de su salivar maldito a mis ojos
macabras las viudas del desasosiego son llamadas a gestar,
enfermas sirvientas del horror,
que danzan cueca, y danzan huayno, y al danzar, arpías, se van mofando,
en rituales velados que con mi propia sangre son alimentados.

y ya basta dionisico fervor!, no quiero
mas perderme por vos otra vez el dulce amor,
no quiero mas la savia rica en dolor
de tus brazos de amnesias saciada,
que aplacadas bajo tu mirada
mis bellas alas doradas
al hastío de mi ceguera fueron condenadas.

 

angustia, dolor, paz y tormenta eterna al final de tu epitáfio y comienzo de tu muerte. geniales letras las suyas luego de un tiempo de ausencia, como si se curtiera la imaginación