El problema de ser bueno escribiendo poesía

El problema de ser bueno escribiendo poesía, es que quizás siempre esperen lo mejor de nosotros. ¿Y que tal si ya no nos surge nada? ¿Que tal si ya no somos tan buenos?
En realidad el problema de ser muy bueno, se aplica a casi todas las cosas.
Yo nunca tuve ese problema. Siempre estuve en la línea, entre las palabras bonitas y lo mediocre. Es una buena posición de hecho. Me permite aprender cosas nuevas y mirarme sin creer que lo se todo. Porque al fin y al cabo de eso se trata la poesía, de aprenderla.
¿Y qué es poesía? Alguna vez escuche que es un pensamiento muy íntimo del cual sacamos una verdad universal. Es decir puede ser una mentira, pero los demás deben poder hallar una verdad acerca de ello. ¿Que si alguna vez lo logré? Deberé preguntar uno por uno a las cinco personas que me han leído.
Por el valor de la creatividad hay un premio, un trofeo, una reputación, tantos y tantos me gusta, no se equivoquen, también a mi me agradan. Solo desearía entender un poco más allá de eso. ¿Puede la poesía hacerme entender el mundo en que vivimos? ¿O vivo según la entiendo? Supongo que esa y otras tantas cosas las comprenderé con el tiempo.

 

Es lo mejor, estar en medio de la tabla, pocas presiones y siempre aprendiendo. Muy buen escrito, compatriota ! Felicitaciones por este trabajo y por tu talento ! Abrazos

 

Gracias por tus palabras Miguel, te mando un beso

 

La poseía es una mierda, y el poeta es un pusilánime
paupérrimo hijo de puta, y en eso...
En eso todos somos buenos.