El país de los espejos

La vida se me escapa tan deprisa
va corriendo como garza entusiasmada
va midiendo las leguas de mi sonrisa
y me trata como idea mal gastada.

Sus huellas abanican mis pensares
sus alivios no me quitan la tristeza,
si miras éste escrito léelo deprisa
antes de que desaparezcan las ginebras.

Tan ruin y efímero fue el tiempo
sacudiendo las aletas en mi dirección,
me amarré al país de los espejos
y allí mismo enterré a la imaginación.

Tiembla un segundo mi agonía
caravanas se enzarzan en el desierto,
el oasis fue alegría
tan rápida como un tiempo mejor.

Vive la tristeza en mis almohadas
desayuna cada día en mi reloj,
el alma mía la tiene acompañada
apártate que eso es lo mejor,
vive la nostalgia en mis encierros
en mi calle donde estuvo el corazón,
vive también en el país de los espejos
donde mi imagen nunca es la mejor.

Luciérnagas sirven de taxi para fugarse,
el brillo de tus ojos mejoró
mis respetos por tanto buen fiarse
de la esperanza que eché y nunca volvió.

Tose mi amanecer contigo, cambia luces,
amanece y no concibo tocar campanas
mis pesadillas me deslucen
mis ganas no son buena arma.

Vive la tristeza en mis adentros
desayuna cada día en mi reloj,
el alma mía le echa el cuento
y nunca me doy cuenta yo,
vive la nostalgia en mis encierros
en mi calle donde estuvo el corazón
vive también en el país de los espejos
donde mi imagen nunca es la mejor.

 

Excelente obra, reflexiva, creo es la primer vez que te leo, sinceramente me agradó tu estilo y tu versatilidad; eres un gran tejedor de versos que enseñan imágenes nítidas y contundentes...

Un placer verdadero encontrarme con tu joya.

Saludos!!!

 

Gracias por tu comentario, se hace lo que se puede.