Confeso

Cuando te veo sudan mis manos,
emana la torpeza en mi cuerpo,
campanea mi pecho y arden
mis anhelos de estar ahí
contigo.

Quisiera ser tu abrigo,
el abrazo que sosiegue
tus lágrimas mas profundas.
Sacar tus mas hermosas sonrisas,
quiero sentir junto a ti la brisa del mar,
sentarnos entre el roquerío extenso
y dibujarte en la arena un corazón
con nuestras iniciales en el centro.

¿Que lindo es soñar no es cierto?

Pero me siento cabizbajo,
no tengo forma soy un estropajo
por eso ahogo mis penas
entre vasos en una botella.
Mirando al cielo me acuerdo de ella,
la veo tan lejana como una estrella
a años luz de mi solitaria realidad
creo que juntos nunca podremos estar.

Por las noches muero y en el día queman
mis emociones entre si se estrellan
y se pelean tan fuerte que nadie puede escuchar
mi corazón colgarse por no querer soportar.

En que momento calaste
tan profundo en mi cabeza
dejaste en jaque
mis sentidos y nadie mas que en ti piensan.
Este dolor emocional no es deseo
ni para el peor de mis enemigos.

Me dijiste que eres casada pero que puedo ser tú amigo.

En el amor no hay recreo,
muy en serio lo digo.
Si pestañeas pierdes
poeta quedas de testigo.

Así es la guerra cuando se trata de amor.
​

 

Dolientes versos que nos regalas, desde ese amor que no se concreta,
a veces las cosas no se nos hacen fáciles, quizás entonces habría que
buscar otros caminos. Placer leerte Gahbriel, gracias por compartirnos
tus letras. Besitos apretados en tus mejillas.

 

Muchas gracias por sus consejos y su lectura, le envío un abrazo fuerte.

 

Tus versos con mezcla de sentimientos de dolor, amor e impotencia, Gahbriel. Saludos con mi respeto.
Azalea.

 

Dolor, amor e impotencia, tu misma lo dijiste.
Gracias por su comprensión, un abrazo cordial.

 

Ánimo, Gahbriel. Mejores tiempos vendrán. Acá estaré, por si deseas hablar con alguien.
Un abrazo.