Amorfo de Dios

Las horas del insomnio. La hoja fina

de luz que escapa y va entre quicio y marco

de la puerta. El tic tac que asesina

al tiempo lentamente, y ese parco


adagio que al mañana existe. Claro

para Dios si está allá arriba y terco

para mí que soy tan simple. Me paro

entre las sombras. Palpo acá, y me acerco


a un mueble que me lleva y otro esquivo

y voy, con paso corto. Me demora

la luz, la tinta y hoja donde escribo


los versos que tú estás leyendo ahora.

Pienso, que así habrá escrito Dios mi entorno,

las horas de mi sueño y mi trastorno.



Yolvi Efraín Cauro Méndez.
Enero de 2012

 

jajaja, gracias querido amigo... gracias por ese pequeñito análisis que te molestaste en hacer... un abrazo a los el Liceo Poético, en especial a Julio.

 

Bienvenido al portal, y veo que tu entrada la haces por la puerta grande. Ya que nos presentas un bello soneto, con detalles técnicos, sí, pero que te serán fáciles de solucionar para pulir tu obra.
Esto lo supongo porque veo oficio y mucho talento por delante.

Con respecto a los detalles, algunos te los marcó ya el compañero Veleis y otros si aparecen te los marcaran los maestros del foro.


Un abrazo grande y a continuar publicando obras.

 

Gracias hermano Dani, lo haré... gracias por el estímulo y por darme la bienvenida... un abrazo. Yolvi.

 

Es un poemazo , me encantó. Yo los detalles técnicos los dejo a los expertos que para eso están.
Escribes muy bien , poeta
Un abrazo