Alba Rocio, donde estas?

Lejanos tus ojos
cercano mi amor
En ti reposan las golondrinas
En ti se refugia mi son.

Busco tus labios en el viento
y te siento tan cerca;
sera que no estas lejos,
o es que vives en mi?

No necesito tu recuerdo
cuando vives en mi memoria.

El marfil de tu canto
se enraiza en la delicada
linea que une la carne al espíritu.

Oh amada mía,
te amo sin que estés,
ya que siempre estás.
La silueta de tu cuerpo
se yergue frente a mi
en cada atardecer.
Desde el rojo alto cielo,
a la inerme materia
que sujeta mis pies.....
y me hace volar,
hasta un mundo infinito
que me lleva al centro de tu soledad.
Y desde ahí construimos
la estructura de nuestro ser.

Incolume montaña del desierto matinal,
te unes al húmedo bosque del sur.
El universo nos observa
con su paciencia ancestral,
como esperando a ver
el resultado de esta fusta colosal.

El sauce delicioso que te vio crecer
encuentra la sombra del estoico pehuén.
La serpiente que rompió montañas y aplaco los valles,
encontró su cobijo
en la profusa arena
de tu desierto terminal.
Y se mezclan y regocijan
y se aman y se entienden,
y despues, .......despues.
Depende de ahora.

 

bello poema,, aunque te soy sincero yo le puliría alguno detalles por allí y brillaría más... saludos

 

Bello y romántico poema, me ha gustado amigo Garcin. Un abrazo. Paco.

 

Gracias por haber leido y comentado. Anthony, gracias, pero prefiero mantenerme en mi entendimiento de los conceptos mas que en la estetica de lo escrito.