Eslabona la noche una luna moribunda punteando remotas estrellas alrededor del espacio. Mis huesos se vuelven madera y crujen, mi sien se vuelve...
Ella reside como tenue presencia, como una sombra por pasillos, un mordisco de pan meloso, chocolate tibio, humo de tabaco, como afable vislumbre,...
No hay sino fitoplancton aglutinado en ese cielo matiz marino, centelleante bioluminiscencia pincelando estrellas, cremosas corrientes autótrofas...
Tomo un vaso de su mar cada mañana, lo robo a espaldas de mi conciencia dormitada. Cuando el cáliz termina me duele el alma. El amor, como...
Traigo el silbido del cuchillo bajo la manga cuando me observan tus ojos de adamantina, y no voy a negar, sientan bien en mi subrepticia herida,...
Apiádate amor mío al tocar mi cautela, acosa la importuna soledad de cada año, viértete, con helechos que gimen abrazados, entierra tu cielo en la...
¿Dónde está el clavo que tejo bajo madrugadas húmedas de la ciudad? ¿En qué recóndito alerillo se escondió?, ¿es fondear el azul-marino del...
Casi al desenlace de lo dócilmente desbordado, arrullado tras navegadas marejadas de melaza, haza de ciruelas profusas y maduras, veredas de...
Cuando inhales el aroma del café y veas un abejorro volar por costras de las hojas desnúdate mujer de todo lo que no me quieres. Hay niebla de...
No me importa, bien-amada, que seamos pastizal de diferentes praderas, y que sólo nos una un viento perdible, y con una lengua liviana. Ah y...
¿Desde cuándo me volví tabaco nostálgico? ¿Desde cuándo me quiebro tan simple, tan hondo? He salido a la verdad errante del hombre. He cruzado...
Como una marejada de vid su mirada sacia mi sed, y todo ese amor anhelante se deriva de su aplomo. Dejándome así, de este modo, como lobo de mar...
Esta hora se llena de ti. A partir del primer brinco doloroso de manecillas. Desde el punto donde tu cuerpo de semilla temerosa se eleva y...
Me sustrajeron bosques y profundidades, turbios y furiosos, vagabundeando sueños, y estrellas pensativas me miraron afiladas. Ansiosas hogueras,...
Como una sumisa cordera de este páramo arado y muerto. Ardua, vaya que con sus patas de adobe, cabizbaja, anda pisando una soporífera lluvia de...
<<Poco importa que ese nacimiento brinde extasiadas uvas y se tuerza el cielo en índigos rizos de estrellas, porque recae solemne al añejo de un...