Persisto. Soneto.

Me niego a convocarme fallecido

al reto de vivir a mi manera,

a dar de corazón mi rima entera,

a verme en tu mirada amanecido…


Al cielo que me tienes prometido

me niego a no entregar mi sementera.

Haciéndome con tierra la escalera

persisto en el azul desconocido.


Me visto en el verdor enamorado

que nutre de expresión mi voz ardiente,

exangüe pero libre y pertrechado.


Me niego a no sentirte refulgente

saciando de futuros mi costado

con la feracidad de tu presente.

 

Sensacional, optimista, comprometido con tu acervo. Como siempre un placer estar aquí.
Con mi abrazo muy fuerte.
Salvador.

 

Muchas gracias, Salvador. Otro abrazo fuerte para ti. Buen día.
Esteban.