¿Mentiras piadosas?

Como tabula rasa somos neonatos
que sin saberlo llegamos al mundo,
y pronto “aprendemos” algunas mentiras piadosas:

- El Sol es el Sol, no tiene explicación,
como no la tienen los días y las noches.

- La Luna es el Sol, que se cambia de ropas
para salir en las noches vestido
de princesa enamorada.

- Y las estrellas son el decorado de la madrugada.

Pero aquel niño, que ha dejado de serlo,
siente con el tiempo que todo es una farsa:

- El Sol es una estrella que no habíamos contado;

- La Luna es para alumbrar en las noches a los enamorados

- Y las estrellas, ya no existen
desaparecieron hace millones de años,
dejando su pequeña luz,
para que no la olviden los humanos.

Y así, pasando el tiempo,
el niño, que ya no lo es, se pregunta… se pregunta…

¿Qué quedará de cierto en este mundo,
si ya no se puede creer ni en los Reyes Magos?
¿y las cigüeñas?
¿Cuántas mentiras más le han dicho a los niños,
desde que Adan fue creado?
¿Pero será verdad que fue creado?...

Dejemos de pensar en estas cosas;
mejor le pregunto al señor Rubik,
cómo se le ocurrió esta idea loca,
que de tanto jugar con ella ,
nos retuerce las manos.

Frank Calle (4/ agosto/ 2021)

 

Muchas gracias de corazón, bristy, es muy oportuno el comentario. En realidad no creo que el poema tome partido, más bien trata de ponerse en la posición del niño casi adolescente, que empieza a descubrir el mundo dentro del contexto en que le ha tocado nacer y vivir -algo que puede ser muy diverso- y comienza a formar su personalidad. El niño no cuestiona el descubrimiento, pero seguramente en unos más que en otros, es capaz de darse cuenta de que muchas cosas no son como se las habían prefabricado; quizás sea ese el término apropiado, iniciar la vida en un contexto mitad realidad y mitad surrealismo.

Un abrazo,

Frank
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Interesante poema, me gusta su línea narrativa y toca un tema controvertido y difícil. La adolescencia no es ingenua, pero tampoco es experimentada. Nos cuestionamos muchas cosas luego también, hay muchos adolescentes tardíos.

 

Me alegra ver su mensaje, Minona, muy concreto. Ese es el centro del asunto. Esperemos que el poema motive el interés de aquellos que sean sensibles a esta problemática. Yo realmente no esperaba tener tan rápidos visitantes, eso me estimula.

Un abrazo,

Frank
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