Trampantojo

Trampantojo

Parecía un hombre; tenía aspecto de hombre.
Su piel tibia, preservando el cuerpo de tactos incómodos. Su discurso honesto, arrostrando tímido la dificultad severa. Su caminar erguido, anunciando clase con esos pasos sólidos. Su corazón clemente, compasivo, repartiendo amores entre los queridos. Su mente abierta, acogiendo a todos, abrazando fuerte a los que se acercan. Y sus besos francos, sugiriendo eróticos un profundo afecto.
Abrí los ojos: un parpadeo y vi al monstruo.
Con el aliento infecto del que miente intrépido, el caminar fingido del que persigue réditos, los gruñidos toscos del que pierde presas, la sangre fría del que encubre enconos, la mente insana del parásito inútil, el lamer grosero del que pasa hambre.
A punto de confesar mi aprecio, se convirtió en caníbal para invitarme a una merienda.
Abre los ojos.

 

A veces, el mal se viste de etiqueta y te engatusa con parsimonia y gestos encantadores, que no son mas que trucos, para atraparte en su red de caza ilusos. Sí, abre los ojos, y evita esas tóxicas amistades. Y si son amores, ni hablar.
Gran consejo dejas, en tus breves letras.
Felicitaciones y un saludo de quien a disfrutado leyéndote.
Rodrigo del Río

 

Una invitación fuera de orden.
El despertar pone las cosas en su sitio.
Un placer leer y dejar mis saludos cordiales.

 

Pfff, de verdad que me siento fatal por mi poca correspondencia. Nada me gustaría más que el que las cosas fueran distintas, y poder dedicarme como os merecéis. Pero sabed que os agradezco enormemente vuestra presencia. Y que espero que pronto pueda dedicar más tiempo a leer todo lo que me gustaría y a animaros como ustedes a mí. Lo siento de veras.

Gracias mil por estar, no me olvido.

Un abrazo .

 

Como todo el mundo abra los ojos no queda una pareja felizmente casada en toda la faz de la tierra; ¡bueno, a lo mejor un par o tres de parejas!

Escribes muy bien.

Saludos.

 

Conocer realmente un poco a alguien tarda toda una vida.
Excelente micro..

Cordiales saludos.

 

Excelente presentación de las dos caras de una misma moneda. Felicidades!

Saludos,

Palmira

 

Las apariencias engañan muchas veces, Si una persona parece perfecta, desconfía, sólo su máscara es perfecta.

Salud y ventura.