Sacrificio diario

Caminar cada mañana
es un sacrificio que me
reprocha el alma.

No tengo más remedio
que lanzarme al abismo
de las calles muertas.

Sé que todavía sigo
perdida aún cuando
giro la llave.

Padezco el dolor
que conlleva sacarse
la mente a trozos.

He despilfarrado
un cúmulo de sentimientos
que no podré recuperar.

Una tormenta de sueños
que ya no sueñan
con el día esperanzador.

Cuando miro el cuchillo
siento el amor perdido.
Sangrando con el fuego.

 

Es un bello y melancolico poema. Al paso del tiempo se da uno cuenta de las cosas que dejamos ir y el dolor en el alma es insoportable. Grato leerte. Feliz Día!

 

Caminar cada mañana
es un sacrificio que me
reprocha el alma.
Me identifico con estas palabras.
Saludos y buen descanso darle-maiden.

 

Muchas gracias. La verdad más dolorosa es que junto a esa pérdida se encuentra el irremediable sentimiento del vacío, y eso es más duro que la tristeza misma.
Un saludo.

 

Me alegro de que mi poema te haya llegado.
Un saludo.