Ofrenda

Hacia el santuario irremediable de tu cuerpo, el camino del alba es llano, es frio,
E l agreste amor que me convoca hasta tu templo es mas que profana, tardía obsesión.
Y es que el estrecho sendero de la dignidad está lleno de espinos por los tiempos de mi estío,
soy romero que noche a noche desciende a tu secreto, a comulgar pedazos de tu corazón.

Si por el día soy ateo, por las noches fiel creyente que te adora arrodillado,
pero en las madrugada espero la resurrección de la carne, la tuya sobre la mía,
y hasta el final de los tiempos de aquellos de mi sinrazón, vivo un tiempo desolado,
voy de cordero para el sacrificio, zarza ardiente de pasión, ansiedad que no desvía.

En el ara de tu entraña mis ansias se santifican, feliz mártir de tus madrugadas,
Y no me expulses de tu paraíso, enséñame una oración, dame un dogma que comprenda.
Evangeliza mis ganas, haste mártir en mi ardor, ora por mi salvación, y entrégate santificada,
si mi alma es tu pan de cada día, dame también comunión, ten mi cuerpo como ofrenda,
que el tuyo es mi religión.
CHE.

 

Para rendirle culto cada noche, y sentirse ciervo a la pasión!!!!!



Saludos

 

Hermosas letras.
Un placer leerte