¡Mi libertad!

Eres deseo de manada,
todos de ti quieren un trago,
eres como el sexo deseada
eres un intento del amago.

Pesadilla de dictadores
y utopía de soñadores,
bella, cuales primaverales flores,
irreal, como verdaderos amores.

¡Mujer!, al poder izada
deseo carnal de la historia
que enfría el calor de la amada,
que forra la pared de escoria.

¡Roja!, eres soñada,
unos te dan una rosa,
los demás te dan una espada,
a llantos aclamas piedad, pero
no olvides que eres mi rosa
no olvides, ¡que eres mi libertad!.

 

Lindos versos.
Estrellas para ti.
Antonio