La disolución.

Paseo en un sendero
con la luz apagada,
para poder ver las
estrellas que danzan
en el cielo.

Si soy tan imperfecto
que la muerte, me muestra
su perfección.

La vida es soledad,
como la muerte,
esta sola y busca
la vida para que le hable,
y yo le hablo a la muerte
que la siento sola,
porque los muertos olvidaron
abrazarla en su encuentro,
anhela el amor como todo ser también lo anhelo.
Y en la vida, me da una sonrisa
para que la recuerde.

Y viajo en su memoria
con los tesoros del presente.
encuentro aposentos
de la mente iluminada,
que esta ahí...
tambien muerta, olvidada.

Cuando me conociste
no conociste a un Juan
un niño o un hombre,
cuando me conociste
te conociste...
cuando te conocí
también
ahí me vi.

y ahora iremos por el olvido
preparando otro encuentro.
pues quien entra,
es la luz,
y da su adiós,
a la existencia
y da su hola
al misterio
a la muerte.

¿Y quién quiere morir?
difícil tener que hablar
del morir.

Vi la muerte
Y la vida.
Y ahora mis ojos
que lloran muerte
que lloran vida.
descansan quietos en su eje
para poder respirar.

Simetría abismal,
equilibrio diáfano,
contemplación de la paz.

El mundo se detiene,
el tiempo se detiene,
la vida se detiene,
la muerte se detiene,
Este sámsara se detiene.
y cuando otro comienza
recuerda que se detiene,
Y un fuego también es calma.

me di cuenta que ni yo
me conocí todavía,
que no es sino la magia
del no existir que dice yo
y entra en el salón de los
espejos.

Donde soy todos los cambios
y cuartos empolvados que aun
no he visto.​

 

Versos bellos, preciosa obra, excelente.

 

Un recorrido interior reflexivo y colmado de profundidad y sensibilidad que encuentra resonancia mientras te leo...
Muy agradable encuentro con tus versos amigo...
Te abrazo con todo mi cariño...

 

La calidad impresionante de la obra maravillosa.

 

Me gustan mucho tus versos, un poco oscuros, muy interesantes. Saludos!

 

Ay, muy bonitos versos Hombre nuevo, te felicito. Beso