El castillo

Ilumina la luna el gris castillo

y en el agua del foso se refleja

así mientras cordura ya se aleja

se arranca el corazón a un cervatillo.


Tenebroso el lamento de un chiquillo

con un grito de bruja se empareja

traspasando la puerta con su reja

del oscuro salón me maravillo.


El nido del vampiro yo he buscado

y al final ya encontré mi pesadilla,

forzando el ataúd en buhardilla


engendro de Satán me ha castigado.

Viviendo ya mi propia eternidad

voy descubriendo negra mi maldad.

 

Bello soneto del castillo, me encantó. Gracias por compartirlo. Saludos cordiales desde Venezuela.

 

Muchas gracias, Gerardo Gamboa.