"El anillo!

Te regalo los crepúsculos
de los espejos diamantinos,
la arista exacta del vuelo
de mis versos desnudos,
el erizo de las estrellas
coquetas y temblorosas,
el enjambre
torrencial del sentimiento
en esta noche de amor
de dicha y suspiros.

Tuyo
es el despertar de mis ideas,
tuyas son mis manos
escribiendo en tu vientre,
tuya mi silvestre lluvia
cayendo en tu rostro
como esponja de nieve,
tuya la fuerza infinita
de este amor inexplicable
que por ti yo siento.

Hoy recupero el pentagrama
de la sinfonía perdida
para cantarte mujer amada
la melodía más hermosa,
atrapo la fragancia
de la energía absoluta
y de su cuanticidad te regalo
su exquisito aroma.

¿Te acuerdas mujer
de aquella mariposa
blanca y roja
del azul sendero?
¿Aquella mariposa
noble y bella
de aleteo infinito
y pausado vuelo?
hoy te la regalo
en el mismo cielo
pintando el color
del primer encuentro,
dibujando el bosquejo
imprimiendo la huella
del destello de luz
¡De tus ojos bellos!

Recibe esta noche
de mágica belleza
a la luz de los astros
vigilantes y encendidos,
mi cántaro lleno
de sentimientos puros,
el manjar de mis labios
en pétalos florecidos.

Y al sentir el anillo
de lo inefable en tu dedo,
universo pleno
abrazando tu mundo,
comprenderás
que lo eterno es el instante
del amor vivido hecho realidad...
¡Convertido en sueño!

Tato Ospina
DRA
Colombia

 

Todo un cause cristalino de profundas y ricas metáforas.
Un gusto leerte.
Darío.

 

Precioso, una preciosura magnífica, bellos versos.