Digno amanecer

Mas allá de donde la vista comprende,
se eleva un nuevo cielo,
blanquecino como espuma de mar,

corrientes que purifican los suelos,
mareas de un conocimiento perfeccionista,

mi prometida danza en la intimidad del bosque, preciado paraíso, cada paso se vuelve altar,
no conocemos el ocaso,
así como las rosas se nutren del sol,
astros que no se detienen en su labor,
humanizando la divinidad,
siempre un paso delante,

la caricia cuidadosa del viento,
leve, pero pura en su totalidad,
resguardando las semillas y su sentido,
nada mas que un florido futuro,
un destino comedido,

deleite merecido,
sembradía de empeño y esperanza,

ruge el amor en cada corazón,

levemente pronuncio anhelos de ensueños,
sabiendo que la felicidad será eterna,
condescendiente fortuna,
que se alimenta del presente,
que su hermosura radica en la espesura
del bondadoso pensamiento,

así como una rosa emerge y renace,

mi amor, entre certezas,
como estrellas,
se iluminan y se esparcen.