Descuido

Fueron tantos los descuidos
que un día sin darme cuenta
el amor se fue alejando
como agua de manantial
hacia un mar de indiferencia
y arrastrado por el tiempo
se perdió en la oscuridad
de maltrechos sentimientos
... y ya nunca más volvió
a esta playa donde hoy
lo añoro con la angustia
de un náufrago desolado
en las arenas del desamor...
en soledad... olvidado

Amor que de un triste ayer
vuelve en sueños hasta mí
haciéndome recordar
la que por descuido perdí !​

 

No sabes amigo Martín como me identifico con tu bello poema, ser descuidado a veces va en la persona y es un rasgo de la personalidad difícil de corregir, tras batacazo y batacazo se va aprendiendo algo, no mucho pero algo. Abrazote vuela. Paco.

 

La personalidad de uno afecta:tardíamente nos damos cuenta cuando todo está consumado.

saludos

 

Bonito poema..un gusto leerte.saludos desde Granada.Luis

 

Si las personas tomaran real consciencia de que lo valioso debe cuidarse, tendríamos un mundo perfecto, un mundo donde abundara el amor.
De todos modos, siempre se puede virar el rumbo del descuido y si no es tarde aún, recomponer.
Me agradó la historia de tu poesía.
Un abrazo.

 

Paquito, me parece que en las cosas del amor tenemos varias semejanzas .
Yo vuelo por acá... los cielos de España son para tu inspiración.
Un grande abrazo

 

Es verdad tocayo.
Gracias por tu visita.
Un abrazo

 

Gracias Luis por tu comentario y visita.
Un abrazo

 

A veces Cecy la vorágime de la vida nos envuelve de tal manera que dejamos de prestar atención a lo más importante, que estando a nuestro lado lo pensamos como inalterable... y su pérdida nos golpea con la fuerza de la culpa y el arrepentimiento.
Esa carga de nuestros pecados, cuando nos sosegamos se percibe con más nitidez.
Son situaciones, que incluso, pueden repararse... pero ya nunca serán lo que hubiesen sido.
Gracias por estar presente !
Besote

 

un poema muy profundo. y muy sincero, grato leerle

 

El amor es un jardín del cual solo somos simples jardineros y cuando lo descuidamos, las flores se marchitan y las mariposas se alejan, de la misma manera se empieza a marchitar nuestro corazón, hermoso poema, saludos Alex