Canción maldita

Nado contra corriente para ver devolverse el río,
para zarpar de este muelle a todo vapor,
y dejar de último las cicatrices de mis anillos
y desnudar hasta mis raíces y no volver al dolor.

Tengo el alma marchita en cada esquina
un tumulto de huesos que nadie reconoce,
y ni el amor ahora me conoce,
soy mendigo de mis pesadillas.

Un arca de oro guarda toditos mis recuerdos
acumulo los tesoros que mataron mis amuletos,
recuérdame que al cantar el gallo este día
debo de cambiar de horario, de nombre y de agonía.

Nado contra corriente para que esta canción maldita
se quede en el cementerio y no recupere vida.

Los mechones de mi pelo
se blanquearon en dos meses,
la luz de mis cegueras y la sombra de la muerte
se inscribieron en mis sellos,
y colgaron rótulos y guerras
un año de los inocentes, en la noche de los buenos..

Oigo un tiroteo que se acerca.
y un portazo al otro lado de mi cama,
la sangre es un juguete que acelera
cuando se activa el fuego y el aire grita: calma.

Lo que calla el silencio
cuando se esconde entre los dedos
es un sermón de quita y pon
con los almanaques negros
y el puñal en el corazón.

Lo que grita el alma herida
es un ramo de nervios y de asilos,
que cuando siente al alma viva
se descompone en el camino.

Nado contra corriente porque se devuelve el río
porque sigo estando ausente,
un año de los inocentes
me quedé a morir conmigo.

Nado contra corriente para que esta canción maldita
se dé cuenta que ahora mismo
derrapé por la autopista...

 

interesantes versos poeta, una lectura que hace pensar, saludos

 

Gracias Arturo. Saludos.