Borracho

Rodando sin control en mi caída
sin conciencia y descoyuntado
arrastrado, perdido y desbordado
camino hacia meta desconocida.

Marcho con mi rumbo oscurecido
y voy hacia incógnita impensada
estando el alma muy obnubilada
mi cerebro, de licor, va empapado.

Tambaleando las caídas me detienen
y los golpes agravan los daños
que ya mis duros dolores infligen.

En bares voy encontrando extraños
tan ebrios como sus diablos piden
y como yo van igual que los rebaños.
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es una triste imagen, que suelo ver cuando paso por alguna esquina donde se reúnen y es triste ver lo que provoca este vicio en mucha gente que pierden familias, casas y se quedan sin nada por tomar, placer leerte. Abrazos

 

Ay que cambiar amigo, hay que cambiar jajaja
Ingenioso poema, real y cotidiano.

 

asi es mi querido amigo
muy buena onda para vos
saludos

 

tenes razon amigo ramiro
pero que debemos cambiar en muchas cosas
muy buena onda amigo rampoeta