Amanece

No sé si fue dormido o bien despierto
cuando te recostaste en mi regazo
ungiéndome de paz con ese abrazo
añorado, frescura en mi desierto.

La dulce melodía con que advierto
tu contorno, preludio del flechazo
que unió, del corazón, cada pedazo,
despertando el sabor que estaba muerto.

Y como a quien empujan al vacío
me entrego sin rencor, sin objeciones,
dejándome llevar, sin condiciones,
cual tronco navegando por el río
de la vida, rasgando los patrones,
conforme, sin pedir explicaciones.

 

Dulce sometimiento. Un gran soneto. Un gusto volver a leerte por aquí.

 

Buen título para un día como hoy, Juglar.

No sé si estoy dormido o despierto cuando leo la belleza de tu poema.

Precioso soneto de amor que corre “ ...por el río de la vida... “.

Un placer poder leer tus letras de nuevo, gracias por escribir de un modo tan bello.

Un gran abrazo, poeta.

 

Gracias a los dos...
De nuevo por aquí... espero que por mucho tiempo.

 

Ojalá haya sido despierto, amigo! Si no es así, seguro llegará. Un placer leerte.