2. Autem

Querido mar,
no sabes cuánto te aprecio.
Sin darme cuenta, me volviste esclava,
de tus encantadores movimientos.

Tu serenidad es como remedio a mi soledad,
tu agua salada es bálsamo para mi dura piel.
Tus olas juguetean con mi cuerpo,
y tu blanca arena cubre mi ser.

Quiero huir contigo,
ser náufraga en ti.
Quiero navegar todas las noches
sin preocuparme a donde ir.

Pero sé, mi querido mar,
lo engañada que me tienes,
ya que tu serenidad no me avisa la tormenta,
y tu agua salada me envenena.
Tus olas me arrastran a la inquietud,
y tu arena quema mi rectitud.

No me encantes ya más,
porque me desharás, mar.
No me digas que me amas,
cuando te faltan mil palabras.
No acaricies mi piel,
cuando solo quieres beber.

Tu profundidad me aterra,
tu ira me horroriza.
Pero sigo volviendo a ti, mar,
porque no sé que haría sin tu abocar.

Me atraes, más y más.
Deja de hipnotizarme,
ya que no puedo abandonarte.

No dejo de pensar en ti.
Mi queridísimo mar,
¿Qué has hecho en mí?

 

Hay que disfrutar su serenidad y su profundidad, aprender a nadarlo y a bucearlo...
No tiene palabras, porque es una biblioteca entera. No bebe de tu piel, la desinfecta. No te encanta a ti, existe y es grandioso; su solo ser encanta a todos. Cuando le quitas intención y objetivo, es más comprensible y disfrutable y el miedo se pulveriza.

Como en el poema anterior, haces una asociación, esta vez del océano, con el amor...
Sus pros y sus contras...
Pero da cierto toque de ironía esa personificación tanto de la Vida como del Océano, porque ninguno de estos buscan nada de ti (yo lírico).
Sólo están allí, son parte de un Todo y (te) dan o (te) quitan, como parte de sus características propias...
Da incluso para reflexionar, que quizás, las personas tampoco hacen nada por gusto, sólo son ellas amando como saben o no... Y uno es quien pone lo demás.


Un gusto!
Saludos

 

Impresionante.
Me has analizado y concluíste en cuestiones que ni yo me doy cuenta.
Jajajaja gracias por tu opinión. Me encanta escuchar lo que sacan de mis letras.

Que tengas una bonita mañana

 

No hay nada más delicioso y placentero que una playa y su coqueto mar.
En definitiva, mi escape y pequeño paraíso para huir de TODO.

Que tengas una linda mañana y gracias por opinar ❤️

 

evocas el mar...como paisaje encanta.
y luego la dinámica del ying y el yang, en su existencia magnética...
siempre hay alguien que resulta mejor librado...

huy.... mejor silencio.
solo diré, que me gusto
saludos.

 

Una espuma de sal y yodo.

 

Querido Zev, gracias por opinar en mis humildes poemas, un poco chafitas pero honestos.

En efecto, es ying y yang. Suspiro melancolía y alegría al pensarle.

Saludos

 

Espuma que, yo idiotamente, creo que es refresco, pero trágicamente me enferma.

 

Y si tomás esas pastillas que tomaba Alicia, esas que la hacían grande.

 

¿Dónde las puedo comprar?
¿Dónde las puedo encontrar?
Espero que me ayuden y que me quite esos males de niña.
Pero de verdad no me las quisiera tomar, ya que a Alicia solo le trajo más problemas y amargura. Prefiero comer las que te hacen miniatura.

 

Jejeje.

 

Es una relación agridulce. El mar tan sereno y provocador, me atrae a su marea. Sin embargo, sus olas latigan mi ser sin piedad.