Sepultar la fe

Siniestros presagios ubican,

memorias en donde el tiempo ha cedido,

de a poco

lo que parecía ser pasado,

se inclina
hacia las cascadas del olvido,

indiferentes, nuestros dones,

no se aferran a nuestra piel,

buscan desaparecer,

comandados por el futuro,

cauces de presentes se alzan,

para sepultar, por fin,

toda sentencia de fe.