Pobreza en Navidad

POBREZA EN NAVIDAD

Está cerca la alegre Navidad
y todo por las calles se ilumina,
remedo de la Luz alta y divina
llenando, bulliciosa, la ciudad.

Confesando su gran necesidad,
con la voz susurrantemente fina,
una señora me abordó en la esquina
pidiéndome una escueta caridad.

Otra vez, frente a frente, la pobreza
navideña; vivir es la proeza
cuando exige el claror que se celebre.

No tuvo Dios ni luces ni posada,
como aquella mujer bien educada
que en su casa pondrá el mejor pesebre.

Salva Glez. Moles.
28/11/2025.

 

Pero tuvo una estrella que fue flor
encendiendo su luz en el desierto
anunciando que un niño está despierto
para esparcir semillas de su amor.


Y pronto brindaremos en su honor
por la montaña, el llano o mar abierto
para rogar que el mundo esté cubierto
de esperanza de paz y de color.


Dar lumbre al que está a oscuras es humano
y compartir lo bueno que nos toca:
las almendras y el vino que convoca


porque quien necesita es nuestro hermano
que sea generosa nuestra mano
y el alma como azul cristal de roca.

 

Había escrito un mensaje de respuesta hecho desde el afecto y el agradecimiento. Pero no sé dónde ha ido. Decía en él que comenzando el soneto que me dejas con ese “Pero…” parece que quisieras continuar el mío. Y me ha parecido muy bien porque has aportado un tinte de esperanza que es algo del todo navideño. Es muy, muy de agradecer este poema que conforma tu excelente respuesta y también todo el tiempo que has empleado, como imagino, ex profeso.
Que pases una muy feliz Navidad.
Con mi saludo muy cordial van todos mis afectos.

Salvador.

 

Más allá de todo, es una nueva esperanza.
Me da gusto tu regreso.
Un abrazo.

 

Las luces navideñas palidecen ante la Luz Genuina, como me ha dicho algún buen amigo muy cercano a ella.
Ha sido también para mí un gusto el afortunado reencuentro.

Con un fuerte abrazo.

Salvador.

 

Una reflexión, sin duda, es esta. Muchas gracias por el comentario amable.
Con un saludo muy cordial, estimado Alde, y mi gratitud.

Salvador.