Aires de rebeldía

Frialdad de nuevos días,
cantan en mis palmas
amaneceres de terca hambruna,

¿serán mis milenios fortuna?
¿o solo una desdicha que ha de acabar?

florituras de mi tacto embellecido,
ornamentos cruciales
de pesares pensados por mi corazón,

mi alma se alza sobre mi mente
para entregarme a la incertidumbre,

incertezas ciertas,

nada tiende a parecerse,
cuando las similitudes cesan,
las extrañezas de toda armonía
siembran bellezas irracionales,

se abstraen mis sentidos,
lo abstracto es ley primera,

entre estos caudales misteriosos,
la cordura de ningún ser prevalece,

admiro los filos agudos del no pensar,

en donde saltar,
o en donde nunca caminar,

admiro la belleza pura,
de una altura
en donde no se sienten los vientos,

en donde el tiempo
no ensombrece la existencia,

anhelo el soñar por siempre
y no ser sueño.

 

Excelente exposición, de vuestro más íntimo sentir.
Felicitaciones por ello.
Cordialmente: