¡Más maderaaa!

Donde se gastan millones
y se hacen fiestas obscenas
bailes, orquestas y cenas
así gastan los ladrones.
No se ponen condiciones
mafiosos venezolanos
corruptos, salen ufanos
a robar al pueblo impunes
al dolor de todos inmunes
horribles seres humanos.

 

Los humanos parecemos
unas bestias sin control
nos sube el colesterol
por caer en los extremos.
Nos encanta el hacer memos
para burlarnos de todo
inventamos el apodo,
para sentirnos populares
como niños escolares
que se arrastran por el lodo.

 

Que se arrastran por el lodo
funcionarios inservibles
de chanchullos indecibles
no dudo de ningún modo.
Cuando toman, toman todo,
ni las migajas nos dejan.
y en desvergüenza se quejan
que el pueblo trabaja poco.
En este mundo tan loco
de a poco nos despellejan.

 

Mantienen sus ideales
las almas lejos del mundo.
El muerto es meditabundo
pues tiene tiempo a raudales.
Los problemas ambientales
la crisis y la inflación
no rompen tu corazón
cuando eres puro hueso,
ni te incineran el seso
cuando el seso es un terrón.

Queda entonces arreglado. Me olvidaba que en este hilo no es simplemente cosa de respetar la rima del verso de cierre del poema anterior, sino tomar por com[leto dicho verso.

 

Lo que ese final implica
es que vamos a morir
pero, antes de partir
de esta vida que vindica,
la campana que repica
de alegría en nuestro haber
nos innunda del placer
que es el no necesitar
más de lo que puede dar
el planeta y su poder.​

 

El planeta y su poder
de soportar atropellos
ya me eriza los cabellos
pues el hombre es de temer.
¿Parará ya de verter
humo, mugre y gasolina?
Es que nunca se termina
de abusarlo sin tutía.
Por tamaña tropelía
gran tormenta se avecina.

 

…que ha pintado la tormenta
con pinceles que embeleñan.
Atlántico y Plata sueñan
que todo es lavanda y menta
en la pampa polvorienta
de una reseca estación.
Y motiva el diapasón
del jilguero o la calandria
al más valiente y al mandria
a ser su mejor versión.

 

A ser su mejor versión
nos invita Ermenegildo
y yo convoco un cabildo
para saber su opinión.
En tan grave situación
pido a los "Marcos" que hablen,
en ese punto que entablen
una discusión de altura
y Cirhian en su locura,
los impaciente y se endiablen.

 

Los impaciente y se endiablen,
este verso de Anamer
tiene absoluto poder
para conseguir que entablen,
y no sé si también que hablen,
una relación dichosa,
que, si ha sido recelosa,
se dirija a las alturas
desde las zonas oscuras,
entre el marido y la esposa.

 

Entre el marido y la esposa
arreglaron el entuerto:
hicieron trozos al muerto
con machete y mariposa.
Con astucia de raposa
los metieron en el horno
entre todo aquel bochorno;
en mútuo y tácito acuerdo
se los dieron a los cerdos
en un crímen sin retorno.​

 

Para seguir caminando
son precisas buenas botas,
si las tuyas están rotas,
mal lo pasarás andando.
Tendrás heridas rondando,
calcetines que te sobran
y médicos que te cobran
por aplicar betadine.
El desastre no previne
cuando mis fuerzas zozobran.

 

Cuando mis fuerzas zozobran
hago acopio de entereza
y eso me da fortalza,
al grado que se recobran
alientos que hasta me sobran
para seguir sin dudar.
Y si el trazo al caminar
se suspende en punto fijo,
sigo. Serrat ya lo dijo:
Se hace camino al andar.

 

-Se hace camino al andar-
Serrat así lo cantaba
y Machado resoplaba
sin sus derechos cobrar.
Porque es muy fácil crear
si la letra no has escrito.
Te conviertes en un mito
añadiéndole unos sones;
así te hacen las canciones
y tu vas al infinito.

 

Como asegura el maestre,
conocedor de la ciencia
y luz de nuestra conciencia,
seis meses son un semestre
y tres meses un trimestre.
Tras dura investigación
y larga divagación,
en alarde de viveza
y gesto de gran franqueza
alcanzó tal conclusión.

 

En las orillas del pasmo
me quedé yo con Nadal
que, a pesar de estar fatal,
ganó el set sin un espasmo
y el partido sin sarcasmo.
Lo siento por su contrario,
marcado por el mal fario,
que fue muy digno enemigo
y se refugia al abrigo
de rezar en su breviario.

 

De amarguras y de hieles
están hechos nuestros días,
es normal que no te rías
si estar risueño no sueles.
Esas desgracias que hueles
a distancia y sin aviso,
las que no piden permiso,
no te pillan por sorpresa,
nunca sentado a la mesa
que te marchas si es preciso.

 

Que te marchas si es preciso
de do no te quieren bien
pues has de pensar también
en dejarte a ti permiso.
Para evitar ser Narciso
pero poder priorizar
la salud y el bienestar
sin por ello recluirte
con gusto habrás de reunirte
aliviando el malestar.​

 

Fue despedida concisa
la última vez que nos vimos;
esos besos que nos dimos
con mucho miedo y con prisa
llorando en una sonrisa
por saber que nuestro amor
causa era del dolor
pues sentíamos crecer
flores del mal del ayer
en nuestro mundo interior.​

 

En nuestro mundo interior
hay una lucha larvada
que amarga la madrugada
y muerde cual roedor.
Yo se lo digo: mi amor,
lo nuestro no puede ser
mal final tiene el querer
cuando una parte requiere
un rendimiento que fuere
imposible proveer.