Te esculpieron ,Señor, para mirarte (soneto sáfico puro)

Fue la intención de tu escultor mirarte
con esa calma que el saber precisa
para captar tu soledad, sin prisa,
y en la bondad de tu expresión, el arte.


Y ante tu cruz, con dignidad, sacarte
un gesto amable al que llamar sonrisa
que fuera guía y a la par repisa
donde apoyarse con fervor y amarte.


Presto, a tu hechizo con piedad acudo
y siempre encuentro por doquier belleza
y en el silencio de tu paz me escudo


para entender tan singular proeza:
cómo el artista imaginarte pudo
y hacer tu rostro sin causar tristeza.
​

 

Creo que por norma el artista debe tener a una musa entre ceja y ceja.
Un abrazo, Bernardo.

 

Hermosa oración hecha poema. Una maravilla. Un gusto leerte.

 

Gracias por tu comentario. Efectivamente tienen que tener algo estos artistas del cincel iara hacer estas obras. Un abrazo

 

Gracias Luciana, en estos días y en este país la SSanta es especial me mueve los sentimientos más profundos. Cada cual es cada cual. Saludus. Bernardo de Valbuena

 

Por supuesto que no. Se lo acabo de decir a Luciana. A cada uno le mueve unos sentimientos distintos ante la misma obra de arte. Saludos. Bernardo de Valbuena

 

Muy buen soneto estimado amigo y gran poeta Bernardo, un abrazo con la pluma del alma

 

Gracias Valverde y felicidades en tu onomástica. Así es cuando los sentimientos explotan. Saludos. Bernardo de Valbuena

 

Mil gracias por tu felicitación

 

Hola Bernardo dada la dificultad que tengo con la página me es casi imposible entrar a comentar en ella y publicar, dicho esto me he armado de paciencia para poder enviarte mi comentario con respecto a tu extraordinario soneto, no sé lo que podré tardar en enviártelo pero muero en el intento.
Al grano pues:
Amigo mío, personalmente, hacía muchísimo tiempo que no leía un soneto tan magnífico, tan perfectamente construido y especialmente con un fondo tan traslúcido y limpio, es un soneto digno de los mejores sonetos del Siglo de Oro...y no es solamente una percepción subjetiva mía también lo hemos hablado Salvador y un servidor, y las palabras de Salvador (que sabes de su poesía y extraordinarios conocimientos) son todavía más rotundas al respecto.
Dejamos ambos (Salvador y el que suscribe) nuestra admiración escrita en este comentario y de paso nos gustaría saber si ese Cristo crucificado existe y te sirvió de inspiración si es así nos gustaría saber el nombre o ver la imagen.... o por lo contrario fueron las musas...
Recibe un cordial abrazo y nuestra sincera felicitación por tan magnífica obra.
Pepe

PD: si me permites una sugerencia de parte de Salvador
tal vez el verso noveno pudiera mejorar lo inmejorable:
"Presto, a tu hechizo con piedad acudo"
por este otro:
Presto a tu amor, con mi piedad acudo.

 

Hola Pepe, buenas tardes, y digo buenas porque me has dado una alegría con haberme dedicado tu tiempo en comentar un poema mío , más aún cuando ha sido con una crítica tan positiva. Como creo que te dije en una ocasión yo escribí mi primer verso con 60 años porque mi formación científica no me había , ni por asombro, llevado por esos derroteros, comenzando por aprender cómo rimaban los poemas y entre ellos los sonetos me fueron más asequibles y ahí sigo, pero sin hacer partícipe de mi afición tardía a prácticamente nadie de mi entorno salvo a dos otras personas porque considero que soy un simple aficionado. Tildar este soneto como buenísimo o simplemente bastante digno por tu parte y por la de Salvador me llena de orgullo y con eso me quedo y con los sentidos “me gusta” de mis compañeros de Mundo poesía me siento tan feliz.
El Cristo al que me refiero es una imagen sencilla, sin mucha importancia para el resto de los mortales, porque no es la típica obra de arte catalogada, pero para mí es muy importante.Y ahí lo dejo. Soy amante de la Semana Santa de mi pueblo por pueblo y de las famosas por famosas.Todas guardan lo suyo y son muy respetables y existen imágenes que sin ser conocidas transmiten una belleza especial.
Gracias nuevamente por tus comentarios. Transmite igualmente mis saludos a Salvador.
Bernardo de Valbuena.

 

Las imágenes son siempre fuente de inspiración, especialmente si son las que a nosotros por los motivos que fueren nos transmiten emociones, emociones que indefectiblemente y a su vez tú has transmitido en este (repito) genial y excepcional soneto.
Un abrazo Bernardo