Hoy no quiero escribir.

Hoy no quiero escribir, es que me duele.
La realidad ríe de mis sueños,
dice que soy su esclava y que los dueños
no quieren que yo baile y también vuele.

Y me prende la luz y me despierta,
me señala el andar de la rutina
y enfatiza de aquello que está en ruina
y me augura que pronto estaré yerta.

La pobre tiene envidia a la ilusión
que siempre me acaricia y que yo la amo,
mientras ella repugna. Le reclamo

-siempre has hecho doler mi corazón,
aunque a veces brillaste con encanto,
es tan solo por eso que te aguanto.​

 

Es un camino que vas a tener que recorrer hasta el final.
Un beso, Luciana.

 

Si, la desgraciada realidad. Querido Marcos, gracias por la lectura y tu amable comentario. Un abrazo.

 

No, pos sí, no queda otra. Gracias querido Sergio por leer y dejar tu amable comentario. Un abrazo.

 

Precioso soneto Luciana, un placer leerte. Un abrazo con la pluma del alma. Feliz finde

 

José, muchas gracias tu amable comentario. Un abrazo.

 

Pues lo estás haciendo muy bien, compañera Luciana: píldoras de ilusión para drogar a esa realidad empachada de polillas negras. Si la rutina mata lo que toca, toca matar a la rutina.
Muchas gracias por dejarnos leer. Van mis afectuosos saludos.

 

Y sin embargo escribes. ¡Y lo haces muy muy bien! Creo que escribimos simplemente porque no podemos dejar de hacerlo, ¿verdad? Aunque duela. Aunque la realidad nos aplaste el alma. Escribimos porque podemos ver mejor los monstruos del alma si están fuera. Escribimos porque podemos amar mejor las hadas del alma si están fuera. En el fondo nosotros mismos sin querer llevamos nuestras ilusiones al campo de batalla de la realidad porque allí vivimos, mal que nos pese.
¡Pero que buena es su compañía mientras estamos aquí afuera!¡Qué sería de nosotros si no escribiéramos lo que nos sucede por dentro en esta tierra de realidad!
Un abrazo desde Buenos Aires.
Dani.

 

Pedro, poeta, que más se puede hacer contra una rutina que hasta a veces es es tu amiga, porque es tu única compañera. Gracias por tu amable comentario. Un abrazo.

 

Es que escribir es como respirar, si no lo hago, me ahogo. Poeta, muchas gracias por tan cordial comentario. Un abrazo.