El suicidio de la amistad

Estos lazos de aire y estas palabras de viento.

Una confesión en la noche es como el misterio de un ángel,
quien escucha no ve la luz, la palabra se alza desde el corazón
con alas de pájaro.

Compartir los sueños, la memoria escrita en los libros,
un poema indefinible, leído con los ojos cerrados
en el atardecer de una plaza solitaria.

Beber la luna en los relojes como un canto de vida,
llueve en los cuerpos desnudos -no hay ropa en los nombres-
que acaban exhaustos
ya de bailar a corro
la mazurca de la alegría.

Es un malentendido el silencio
cuando solo en la mirada brillan los verbos
como una hostil letanía de fusiles en alerta.

Y se desdoblan los caminos, y las alas son multicolores,
y el suicidio de la amistad pone su huella en la luz.

Los abrazos han muerto bajo la sombra de un ciprés
que ya no cobija al dios que nos une.

Pervive en un teléfono la última llamada
como un epitafio sobre la lápida del olvido.

 

Extraordinario poema. Un abrazo!!

 

Empecé a leer este poema con los ojos entrecerrados pero a medida que iba disfrutando de la calidad de su contenido, decidí tenerlos bien abiertos.
Favor que nos haces con estar en este portal para admirar tus obras de alto contenido
Saludos, poeta

 

Éxcelentes líneas, emotiva descarga creativa.
Hay que darle a la amistad el suero del amor y la esperanza cada minuto para que no se suicide.
Grata lectura. Saludos amigo, que este bien.

 

Gracias, BEN, por tu amabilidad. Un abrazo.

 

Gracias, Antonio. Un saludo cordial.

 

Gracias, Ansel, por leer y comentar. Un saludo cordial.

 

Gracias, María. Un abrazo y feliz año.

 

Nos heredamos soledades compartidas en los epitafios.
saludos poeta.

 

Bello poema, van dos poemas que me han hecho pensar en un encuentro furtivo, en la bohemia, unas copas que se beben y luego queda su brillo en el cristal roto de la ausencia, en las manos vacías, en las palabras que se quedaron en el aire, en la mudez de la mirada que dice todo y no dice nada. Cuando leo, vuela mi imaginación, o es que siempre sueño, y deseo la felicidad para los demás. Saludos, amigo.

 

melancólico pero profundo

 

Gracias por tu visita y palabras. Un saludo.