El árbol de las lágrimas

Ya las montañas no ríen
ni los valles cantan
entre losríos de lava
de un gris samán.
Entre sus ramas,
las hojas enmagrecieron;
el viento no lo toca
y es su tronco lecho
De un infernal invierno.
Su alma,
su alma agria de vivir
pule de hiel los rastros
de un manantial de loto…
Nevadas, por el recuerdo
borroneado en la neblina
de un triste y gélido samán.


En sus raíces corren los grillos
que enjaulan mi alma.
A sus pies, retumba el eco
de un eterno y fiero amar herido…​

 

Estremecedoras palabras. De aquel árbol alcanzo a distinguir una parte de tu alma.
Excelente poema.

 

Es un poema de muchísima calidad
Te felicito
Saludos

 

Un honor tu paso por mis letras, amigo malco.
Saludos

 

Algunas batallas perdidas y revividas a los pies de aquel confesor, que arrastra un poco de mí. Un placer tenerte por aquí Alvaro. Saludos.

 

Agradecido por tu lectura y comentario amable Luis. Un un verdadero gusto tenerte entre mis letras. Saludos

 

Hermosura divina de arte maravilloso.

 

Maestro, un placer siempre ver sus comentarios. Gracias por leer. Saludos.

 

La divinidad de la obra magistral, excelente.