Una vez soñé soñarte.

Una vez soñé soñarte,

y al cerrar los ojos,

sólo vi sombras donde antes había campo.

Y me creí muerto.

Y entonces comprendí que el dolor no es más que el reflejo del miedo.

Me duele el pecho.

No está tu nombre en mi recuerdo y el miedo acampa libremente.

¡Me duele el amor!

No está tu voz en mis caminos y el miedo murmura confundido.



Una vez soñé soñarte,

y al cerrar los ojos,

tu imagen seca se había ahumado y esparcido.

Y me creí muerto.

Y entonces comprendí que el amor no es más que el reflejo del miedo.

¡Te amo, amada!

Y siento miedo a la soledad de tu partida.

¡Te amo, amada!

Siento miedo, y amor y dolor es lo que goteo.

 

Me han gustado tus letras, estamos conformados por muchos complementos, y para valorar uno, debemos de conocer la contraparte, Hola gloria, un abrazo.

 

Estremecedores versos nos compartes amiga...
Muy grato leerlos... te abrazo con todo mi cariño...

 

Razón tienes compañera... Me alegra mucho que te hayan gustado, un placer.
Muchas gracias por la visita, Un fuerte abrazo desde el cariño.
Hasta pronto! Besos. Gloria.

 

Muchísimas gracias, un fuerte abrazo con todo mi cariño para ti también .
Agradable visita, te deseo una buena noche de poesía...
Mis bendiciones.Gloria

 

Gloria...
Aflicciones que los amores provocan cuando los sueños nos acercan a finales indeseables. Me gusta el "Y me creí muerto" mostrando "el mudo reflejo del miedo" Un fuerte abrazo Gloria, encantado con esta lectura.