Noviazgo

Los niños sueltos en la tarde del toro
gozan del cuervo herido por un relámpago.
Lo han encontrado cerca de la estación nebulosa
donde los trenes que funcionaban a carbón
yacen llenos de moho.
Algunos son maestros de las agujas, los otros tienen ropa nueva.
Esta esquina de crueldad infantil no pertenece a ninguna calle de la memoria
pero la guardo en los callos.
He visto cómo se hace, dice el que parece vaivoda de la pobreza
y el cuervo se dilata hasta picotear en su propio alma
los últimos granos de tiempo.
Entre las articulaciones el cuervo se olvida, tanto rodar de huesos
hace que el arrepentimiento se vuelva insalubre
y es requerida la amputación de las culpas
tal vez por eso fumo, para dar color a los días que me hubiera gustado no haberlos vivido,
para reventar las plumas negras
que barren el calcio de mi recién noviazgo con la muerte.

 

Es un gran poema,estimado poeta,pero no encaja en el foro de realistas.
Saludos compañero

 

Este es uno de esos poemas que cuanto más los lees
más se multiplican las imágenes.Es duro, duele y es hermoso...
Es un placer disfrutar de tu escritura,compañero,un abrazo

 

cosas que se dan sin pensarlo, saludos

 

ciertamente un gran poema amigo

eP

 

El dolor, los recuerdos, el arrepentimiento... todo ello se refleja en los ojos, en el alma del cuervo que picotea sus propias llagas. Un poema grandioso, querido amigo. Mis aplausos y estrellas a tu obra. Abrazos.

 

que agradable sorpresa el encontrarme con su hermoso poema, un abrazo poeta.

 

ah! espero que ese noviazgo con la muerte se rompa...
ah, y yo comprometida,

que también se rompa.

besos, se le extraña amigo,