Sólo Estoy Durmiendo

Arribó la hora vencida
entre vítores y aplausos
de ventanas y balcones
que ven mis ojos cerrados.

Me arrancaron los sueños
como se deshacen galones
fundidos entre las manos
de quienes en otrora los dieron.

Recogí de la esperanza
unas fuerzas aún verdes.
Y en un zurrón de piel vieja
metí mis alientos heridos.

Para recorrer un mundo
que me mira altanero
por encima de su hombro,
por debajo de sus suelas.

Y enterrado entre rosas
me volví abono de belleza.
Yo que fui jardinero
y sol de rubor eterno.

Yo que esbocé sonrisas
en rostros de deidad.
Y pinté en cuadros de cuaderno
camas de musgo y estrellas.

Que me bañé en los azules
ojos de una cíngara bruja,
y salí ileso de cruzadas
que el amor me impuso de precio.

Ya arribó la hora dormida
entre vítores y aplausos
de envidias y codicias
que ven mis ojos cerrados.

No saben que sólo reposo,
que rescataré mis sueños
como se abren en agosto
de par en par las ventanas.

Que mis arrugas son senderos
del mapa de un tesoro.
Acequias para regar
hasta el último poro de amor.

Afluentes tatuados de tiempo
que conducen a un alma tan llena,
que debería hacérsele lugar
a una ínfima mota de odio.

Soy una historia muy larga
que un instante se ha detenido,
para comprobar en vida
el rencor que suscita ser feliz.

 

Buen escrito estimado amigo, Es bueno poder leerte

EDU

 

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Dormí nomás y dulcemente. Para reponerte de las motas del odio y de la envidia, para soñar poemas felices, para acunar desvelos como el mío.

Dormí al amparo del mundo y abrigadísimo de Amor.

Arrorró mi viento
un arrorró azul,
que te da su aliento
ciela desde el Sur.

Un abrazo y hasta el próximo despertar.

 

Gracias Edu,
por tu agradable visita
y tu favorable opinión.

Un abrazo.

 

Muy lindo poema, Viento Azul, es el primer poema tuyo que leo, y me gustó cómo escribes, las metáforas que usas y el sentido que llevan tus versos.
Seguiré por aquí.

 

A veces pienso, mi Ciela,
que los pocos
que se toman molestias
en hacerme daño,
tienen por causa la envidia,
y francamente no los envidio.

A lo mejor me hago daño yo mismo
y busco en el exterior las causas,
no lo sé.

Pero esa es otra historia ...
y para contestarme deberías cobrarme.

Así que me quedo con tu dulce nana,
y Las estrellas argentinas de esta Ciela
susurrando predicciones optimistas,
y tu abrazo amigo,
y tu presencia literal, (de literatura),
que ojalá fuera literal
de esplícita y real,
presente y no cibernética.

 

Viento, esto además de ser PRECIOSO es inmensamente sabio. El rencor, el encono, el odio jamás han conducido más que al auténtico suidicidio de una u otra forma. Y esto tuyo es un canto que se eleva sobre de ellos enbanderando con ello desde ya, tu victoria. A recobrar el aliento y los sueños agostinos, que ya es noviembre y seguro ya lo has hecho.
Me gustó muchísimo. Un abrazo poeta.

 

Es un placer albergarte entre mis humildes letras.
Gracias por detenerte.

Un abrazo desde Mallorca.

 

Gracias azul, sabes que sin ti,
el poema ya no está completo,
y vienes a endulzarme,
y yo dependo ya de tu azúcar profundo.

 

Amigo, tu poema es una esbelta mariposa que vuela por sobre los insectos de la envídia y el rencór... a todos ellos los sobrevuelas, los miras desde arriba pues no te pueden alcanzar...

Hermoso poema amigo. Un abrazo

 

Gracias por tus bellas palabras,
amigo oso.

Un enorme abrazo plantígrado.

 

He disfrutado muchísimo de tu poema, es un estilo muy propio, con permanentes pinceladas de alfabeto bien puesto al servicio de la imaginación.

Un abrazo

 

Gracias compañero,
tu presencia es un placer
en estas líneas-

Que sean dos