La silente hora suprema

La silente hora suprema, cuando los brazos del reloj señalan al punto Norte, sin dilación ni morada, sin retraso ni soporte.

El preciso momento en que se cambia de silente pase a estridente campanada, cuando Cuasimodo se pasea entre las tres Marías del Capitán Veneno.

En esos segundos de arrojo para muerte del abatimiento, se presenta la sensación de superioridad, paz interior y perfecta armonía con el Todo, con la fuerza universal.

La diestra se cierra torno a otras diestras, al tiempo que se palmean espaldas dispuestas. Intercambio de buenos deseos y anhelos. Promesas nuevas, que reemplazan a las promesas muertas ocupando el mismo lugar en el escalafón de la conciencia: El último.

Los ojos en el camino del segundero, anticipan los últimos pasos del giro traicionero.

¿Tendremos la suficiente fuerza de ánimo para cumplir la promesa a la primera persona del singular o jugaremos al cartón de Mafalda*? Cuando pregunta en otras palabras: Si todo sigue igual, ¿Para que cambiamos de año?.

* Personaje de Quino, tira 255​

©®Todos los derechos reservados bajo el nombre de Jorge de Córdoba, Barak ben Asís, Cesarfco.cd​

 

Algo cambia, aunque no se note...El Intangible, toma nota, el tiempo se transforma...
Un abrazo

 

Gracias Rosario por pasearte entre estas líneas.

Un abrazo.

 

El traspaso del nuevo año en el tiempo, mi estimado amigo cesarfco, no hay cambio alguna, sigue la misma rutina. En la contabiliadad del calendario se agrega un número más al próximo anterior. Pero en esa matematica tan simple, se arma el gorgorio, y más que por costumbre que por emoción, se abre el festival, porque el motivo lo amerita, en la mente de los comerciantes, siempre listos para el aumento de sus ganacias. Quien se queda en ese río de creencias, lo arrastra de todas maneras, por un motivo u otro, o sea que, seguimos la corriente, año con año, y así seguirá la historia, celebrado por las nuevas generaciones. Gracias por permitirme comentar, en la exposición importante de tu prosa del nuevo año. Te saluda: Crimolem.

 

Gracias Cristobal, por pasearte entre estas líneas. Valoro tu comentario.

Un abrazo.

 

El cambio ocure, no hay vuelta atras.
Buena reflexion Cesar.
Feliz Aῆo Nuevo!

 

Gracias Flor de agosto por leerlo y comentarlo.

Feliz año 2010

 

guau, cesar!! que maravillosamente reflejas la vacuidad del "supuesto" año nuevo!! es que acaso sabemos cual es nuestro real tiempo, 2010 para los cristianos, 5008 para los judios, es que acaso sabemos con certeza si tenia certeza el calendario gregoriano?? que mas da, querido cesar, si hasta esa duda, te ha servido de inspiracion para dar a luz esta obra!!
de todos modos, la esperanza renace en cada año que supuestamente comienza, porque la verdera esperanza no tiene tiempo ni edad!!!
besos y FELIZ AÑO NUEVO jajaj de todos modos!!!

 

Gracias Maríadelsolar por pasearte entre estas líneas.

Valoro tu comentario.

Un abrazo.