Primera página del diario de un muerto

querido diario:

hoy he comenzado a estar muerto

aquí, en Tenamaxtlán

pero no en Tenamaxtlán
realmente
sino en ninguna parte
dado que sencillamente ya no existo

mi madre llora arrodillada
sobre la gravilla del piso
junto a mi tumba abierta
donde el sepulturero empieza a arrojar
las primeras paladas de tierra

dos de mis compadres de taberna
observan la escena unos metros atrás
de pie bajo el sol
mientras se alternan un botellín con raicilla

¡nomás eso voy a extrañar!

en fin
la cosa es que no se siente nada
estar uno muerto

no se siente nada
ser uno nada

haber pasado
a convertirse
en uno menos

Como si ser nada
no fuera realmente ni siquiera eso
ni ser nada
sino nada más nada
si es que me explico

Ahora bien
siendo como soy
ya prácticamente nada
¿resultaría lógico entonces
que me preguntara
por qué diablos tuve que morir?

¡tan joven!
¡tan recio!
¡tan chingón para tomar!

y
suponiendo que resultara lógico
y pudiera, además, obtener
una respuesta determinada

¿alteraría en algún sentido
mi condición de ente desprovisto ya de entidad
el contenido de dicha respuesta?

¡por supuesto que no!

así que
por lo tanto
mi querido diario
trataré de evitar seguir adelante
con esta absurda
e imposible
escritura...


aunque mucho me temo que
aun sin hacer
en tal sentido
el menor esfuerzo de mi parte
todas tus páginas habrán de permanecer
de aquí en adelante
irremediable
y eternamente
en







...blanco...

 

a mi también me pasa a veces cuando me muero...

 

creo que mi diario a el día de mi muerte, sería diferente. aún asi me gusto!

 

Y tus putas?,,que no fueron a tu entierro?

 

asique murió pepeluche ? y resucitó como jose villa ?

 

estimada ale: el tal pepeluche es un impostor que me mantuvo secuestrado dentro de mi propia casa durante 6 meses, abusando sexualmente de mi y publicando descaradamente mis hermosos poemas de amor y canto a la vida etc (pues yo soy un poeta delicado y virginal) no sin antes haber alterado el sentido y la esencia poetica que contenian, ademas de transvasarlos a su tabernario y burdelero lenguaje. Por fortuna pude escapar de mi encierro, denunciarlo a la policia y recuperar mi identidad. Ahora pepeluche se encuentra tras las rejas, donde seguramente le sobraran "amigos" que le den lo que el me estuvo dando a mi profusamente a lo largo de todos estos horribles meses. Ahora bien, no se si despues de esta experiencia podre escribir aquella poesia pura y luminosa que solia escribir. Yo creo que no, porque ya hice la prueba y la verdad....creo que ahora escribo casi igual que aquel perro... ni modo... la vida tiene que seguir... saludos