Velero solitario

Desde el más íntimo peñón de mi alma,
morada de amores, musas y centellas,
parte el velero solitario de mis ilusiones;
emergente sale como una ardiente flecha
que pronto en llama celeste convertida
en medio de espirales de algodón se esfuma;
algo de mí se va entre sus velas
que crecen como los pétalos azules
del eterno geranio de mis tiempos
dormido entre los aviesos troncos
de las irracionales y sombrías dudas,
que pálidas y desprevenidas quedan
a la espera de que un soplo irreverente
de su sueño milenario lo despierte,….