Una experiencia

UNA EXPERIENCIA

Voy a contarles a ustedes
una experiencia jugosa
degustada con amigos
en una pequeña fonda
de una aldeucha perdida
bajo un macizo de sombras
encontrada por azar
en una campestre zona.
Las tripas ya nos rugían
pues de almorzar era hora.
Pedimos en la posada
algo de comida y copa,
la posadera nos sirve
una tortilla sabrosa
y jarra con fresco vino
del lugar, según la doña.
La tortilla un especial
sabor dejaba en la boca,
curioso le preguntamos
de que era a la señora.
La vieja fondista dijo,
sonriéndose con sorna:
yo mis tortillas las hago
con los huevos de mis ocas.

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En esas fondas perdidas en pequeños pobldos en medio de los montes a los que casi sólo se accede andando todo suele ser natural, de la tierra, sus huertos y corrales.
Todo sencillo y sabroso, digno de ser recordado con placer...:::hug:::

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Bien, de eso se trata de compartir con vosotros un momento agradable, sin el estress de la ciudad...:::banana:::

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Te agradezco, amiga Ropitella, el agradable comentario que me dejas, seguro que a Julita le hubiera encantado la deliciosa tortilla aldeana...:::hug:::

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La envidia, de los erebos
viene como condimento
del delicioso alimento
que provoca a los malevos.

No saben lo que se pierden,
tampoco quieren saberlo
y de rabia se remuerden.

XIII - III- MMXIII

 

Celebro, amiga Nancysant que hayas disfrutado con este experiencia que he compartido alegremente con todos mis lectores...:::hug:::

 

¡Me apunto...! A la jornada y al menú. Abrazos. Churrete.

 

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