Todos recordamos a esa persona.

Cuando un recuerdo te viene a la mente,
cuando su ausencia se hace evidente,
cuando queríamos pasar más tiempo juntos,
sabemos entonces, que la queríamos.

Donde pasabas las tardes sonriendo,
y ahora en soledad te hayas muriendo,
sabremos entonces que no terminamos nuestros asuntos,
sabremos entonces que muchas cosas haríamos.

No es malo echar de menos, mucho menos extrañar
la presencia de esa persona, de ese familiar,
de nuestra pareja, de nuestros amigos, camaradas...
Lo malo es no querer afrontar la cruda realidad.

Yo mismo huyo a mi noche eterna, y siempre estoy con ella.
No me asusta decir que la quería, que su ausencia hace mella.
Temo admitir sin embargo, creer que volverá la persona amada,
a sabiendas, de que ya no cabe ninguna posibilidad...

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si tienes a la persona amada cerca de ti, y por x motivo se escapó de tu vida, intenta correr a trás de tu tesoro,pide perdón por el daño que le has hecho, no desistas; si en caso no tiene ninguna posibilidad de volver, llora con ganas, y vuelve de nuevo con ella, dile que cambiaré de mi actitud, seré más atento a tu amor, tú eres mi estrella...
fue un placer leerte, mi poeta.
el poeta: gonzalo

 

Entiendo el fondo de tu letra, es grato leer este tipo de escritura, de verdad me gustó pasar y leer tu poesía. Mil estrellas a tu pincel.